See the article that I wrote 15 years ago and it is still valid.
http://www.bonsaicomunicacion.com/#!tica-y-tcnica-del-yamadori/cbwc
Welcome to the blog with articles about bonsai. Here I add articles as I write them in several languages. I will add old ones as I stumble over them again. You are welcome to send me translations into other languages and I will publish them here. All text and images are copyrighted, however. Publication only with my agreement in writing.
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Friday, October 4, 2013
Wednesday, July 3, 2013
Sunday, January 27, 2013
Interviú con una revista en Hong Kong
translated by Jose Redondo. Thank you.
-->
7 ¿Disfrutas del
proceso?, o simplemente te enfocas en el mensaje y el resultado.
-->
Interviú con una
revista en Hong Kong
Estas
son mis respuestas
1
¿Que es bonsái para ti?
Bonsái
en general para mi es una forma de arte, es una forma de expresarse
mediante un árbol vivo. Para mí, personalmente, es mi vida, mi
pasión, es la cosa más importante.
2
¿Como comenzaste con Bonsái?
En
1978 vi mi primer Bonsái en un centro de jardinería, después de
leer acerca de ellos. Inmediatamente me intrigo .Siempre he tenido
interés en jardinería, en naturaleza y en arte, vi la conexión e
instantáneamente supe que era para mí. Me parecía imposible, tan
dificultoso, que desesperadamente quise aprenderlo
3 Por favor describa su
trabajo y ¿Que información está intentando pasar?
Mi trabajo consiste en
coger cualquier árbol que caiga en mis manos y llevarlo hacia
adelante paso a paso. Llevarlo hacia adelante significa la
trayectoria entre un palo en un tiesto a una obra de arte, un árbol
que habla, un árbol con personalidad, un árbol con espíritu.
4 ¿De dónde le llega la
inspiración? ¿Nos puedes comentar acerca de la filosofía que hay
detrás de tu trabajo?
Mi inspiración me llega
de la naturaleza, de arboles reales y de mis queridas montanas, Los
Alpes. Mi intención es NO hacer que mis arboles se parezcan a un
bonsái, es más que el bonsái se parezca a el árbol. Aunque la
forma es importante, es el espíritu, del árbol, el que hace la
diferencia. Procuro concentrarme en el espíritu del árbol.
5 ¿Cuál es su mayor
preocupación una vez que ha decidido su diseño?
Mi preocupación principal
es mantener el árbol vivo, después, quiero hacer de él lo mejor
artísticamente. Intento encontrar lo que al árbol le gustaría ser
si tuviese la oportunidad. Esto significa no imponer mi voluntad en
el árbol y dejar que el me diga, guie.
6 ¿Qué dificultades te
encuentras normalmente cuando trabajas con Bonsái? Y más
importante ¿Que emociones se envuelven?
Las dificultades son
horticulturales y artísticas. Es difícil trabajar fuerte con un
árbol vivo sin dañarlo y cambiar radicalmente su apariencia. Tiempo
es el mayor problema, observo mi material de cerca y tengo una clara
visión de cómo será, entonces toma unos veinte años a veces más,
hasta que mi visión se convierte en realidad. El problema es la vida
del artista, cuando tiene la sabiduría, ya se ha hecho viejo como
para ver el resultado de su trabajo. Lo más importante en un artista
es ser verdadero, honesto, genuino. Hago lo que creo que es cierto
sin que me preocupe lo que el mundo piense de mí.
Es de extrema importancia
disfrutar de proceso, de otra forma nunca tendrás éxito. Es como en
deportes o música, si no disfrutas entrenando o practicando, aunque
tengas mucho talento será desaprovechado. Para el mundo Oriental
“hacer “es el propósito, Para el mundo Occidental “el
resultado” es el propósito. Yo simplemente conjunto los dos y soy
feliz con ello.
8 Por favor cuéntanos de
tus momentos más felices y dolorosos, preocupantes.
De los momentos más
felices es , después de sonreír durante años a un árbol feo, un
día el árbol te sonríe a ti, tu eres el único que lo puede ver ,
igual que la madre lo ve en su bebe .De los más dolorosos ,
claramente , es cuando uno de tus arboles muere. Es como si uno de
tus hijos muriese.
9 ¿As sido alguna vez
parado o arrestado por tu trabajo?
Que pregunta más extraña,
bueno, hay gente que recolecta arboles de la naturaleza sin permiso
y han sido parados e incluso arrestados. No he sido uno de ellos.
Parado por hacer bonsái, una extraña forma de arte? Nadie en Europa
me detendría por ello.
10 ¿Qué piensas del
futuro del Bonsái?
Veo un futuro brillante
para el bonsái. Más y más gente tiene el problema en el mundo
moderno de estar separados de la naturaleza. Bonsái es una forma de
reconectar. Bonsái es mucho más que cuidar de las plantas de casa,
es como tener un animal domestico de por vida. Está creciendo en
Europa y mucha gente joven esta atraída.
11 ¿Qué países crees
que tienen más desarrollada la cultura del Bonsái?
En Europa son Italia,
España, el Reino Unido y Bélgica. Japón, por supuesto sigue siendo
el más avanzado pero el interés por Bonsái desafortunadamente no
crece nada allá. Indonesia parece estar muy activa. Mientras, en
China, que invento esta forma de arte, parece dormida en comparación.
Puedo ver que Bonsái pudiera estar de moda en China de nuevo. No me
imagino a China copiando el estilo Japonés de Bonsái como hacen
muchos otros países, me imagino a China creando una genuina nueva
forma de la cultura del Bonsái cercana a el tradicional Pejín.
Miro hacia adelante viendo que esto sucederá en los próximos diez o
veinte años.
12 Por favor cuéntanos
tus planes para los próximos seis meses
Trabajar cada día para o
alrededor de Bonsáis. Viajare un poco por Europa, ire a América por
diez días para organizar mi academia internacional de Bonsái.
Trabajare en tantos arboles como pueda para llevarlos un paso
adelante. Disfrutare y seré un hombre feliz.
Wednesday, January 26, 2011
Reconocimiento de modelos al juzgar bonsáis - Spanish
Reconocimiento de modelos al juzgar bonsáis - Spanish
Reconocimiento de modelos al juzgar bonsáis, o cómo evolucionan los gustos en bonsái
por Walter Pall
Traducción: Pedro Herrera
(Este artículo se publicó también en Art of Bonsai Project como "eristic")
¿Puedes diferenciar entre una conífera y una frondosa con sólo mirar una imagen?. Por supuesto que puedes, cualquier niño puede hacerlo. ¿Puedes diferenciarlas, incluso cuando la conífera crece más parecido a como lo haría normalmente una frondosa y el árbol frondoso crece como una conífera?. Seguro que sí. Ves esto en una fracción de segundo mirando una imagen.
Bien, ahora explica cómo tomas exactamente la decisión. Algunos tendrán éxito con una buena explicación, a algunos se les ocurrirá una mala explicación y otros ni se molestarán. Pero todos tardarán bastante tiempo en expresar algo que han "sabido" en una fracción de segundo.
Aunque nuestro cerebro sabe cómo hacer esta clasificación, nuestra mente consciente a menudo es incapaz de articular las reglas. Nuestro cerebro está excepcionalmente capacitado para este tipo de tareas. Somos unas máquinas increíbles de reconocimiento de modelos.
Nuestro cerebro ha evolucionado precisamente para hacer esto con gran exactitud. Si tenemos un conjunto de objetos podemos crear reglas internas para clasificarlas. Cuando aprendiste a leer te mostraron muchos ejemplos de la letra "a". Has aprendido a ver la letra "a" tanto si está escrita a mano como impresa. Puedes pronunciar la "a" de forma inmediata, incluso si está escrita con mala letra o impresa en caracteres extraños. Puedes hacer esto incluso aunque nunca hayas visto una determinada caligrafía o fuente de letra. Pero te resultaría difícil explicar en cada caso cómo llegaste a tu conclusión.
Eres muy bueno en la decisión inmediata de que una letra NO es la "a". Por lo tanto, debe haber algún mecanismo que te permite hacer esto para leer textos a una enorme velocidad.
El reconocimiento de objetos abstractos es aún más complejo. Aprendes pronto lo que es bueno y lo que es malo. Te dan muchos ejemplos en tu infancia. A medida que te haces adulto tu cerebro recopila todos los ejemplos de actos buenos y malos y en cierto momento descubres las reglas de cómo tomar decisiones. Cuando te encuentras ante una nueva situación en la vida a la que nunca antes te has enfrentado, puedes aplicar instantáneamente estas normas. Así que todos tenemos normas internas, pero difieren ligeramente según se hayan desarrollado. Así pues, tenemos nociones ligeramente diferentes sobre la moral. Estas diferencias llegan a ser sorprendentes cuando conocemos a una persona que creció en una cultura completamente diferente a la nuestra y que aparentemente aplica reglas radicalmente diferentes para distinguir lo "bueno" de lo "malo".
¿Qué tiene que ver todo esto con los gustos en bonsái?. Bueno, ocurre exactamente lo mismo cuando aprendemos a apreciar los bonsáis. Aprendemos que un árbol que sigue las reglas del bonsái que están escritas en los cánones, es bueno. Cuando se rompe una de estas reglas se convierte en malo. Aprendemos que los árboles diseñados por Naka, Kimura, cualquier gran maestro japonés son buenos. No nos conformamos sólo con que se diga. Aprendemos a buscar imágenes de árboles como modelos. Hemos aprendido a ver "buenas" y "malas" aplicaciones de las reglas. Aprendemos a ver las semejanzas en los árboles que son "buenos" y de alguna manera crear nuestras propias reglas internas de decisión. Después podemos juzgar un árbol que no hayamos visto nunca antes. Podemos decir de inmediato si tenemos un trozo de materia prima o una obra maestra delante de nosotros. No todos somos igual de buenos en esto. Algunos pueden desarrollar mucho esto y convertirse en expertos en juzgar bonsáis. Fíjate que no se ha hablado aquí de CREACIÓN de bonsái. Se trata sólo de juzgar visualmente. Según este concepto, una persona puede ser un juez experto de bonsái sin haber tocado un árbol.
La pregunta ahora es la siguiente: ¿hasta qué punto estamos realmente juzgando el mérito de los bonsáis, y en qué medida estamos simplemente utilizando nuestras habilidades de reconocimiento de modelos?.
Sí, algunos bonsáis tienen la capacidad de conmovernos emocionalmente, transmitir un mensaje, hacernos sentir su "alma". ¿Pero podemos estar seguros de que esta respuesta no es simplemente una reacción aprendida?. Apreciar un bonsái requiere entrenamiento. Generalmente no suele ocurrir que alguien que no tenga formación pueda apreciar y distinguir fácilmente entre "buenos" y "malos" bonsáis. ¿No es posible que lo que llamamos formación artística sea esencialmente formación para la clasificación de modelos?.
Ahora, demos un paso más. Me he instruído para apreciar bonsáis contemporáneos mediante una intensa experiencia, y si mi cerebro está capacitado para ese tipo de cosas, entonces formularé reglas para descubrir lo que me dijeron que era "buen" bonsái y distinguirlo del "malo". Cuando visite una exposición y vea el trabajo de un artista nuevo, aplicaré mis reglas del "buen" y "mal" bonsái y haré mi juicio sobre la calidad de este artista. Puesto que la mayoría de nosotros fuimos adiestrados en los mismos libros y con ejemplos similares de bonsáis "buenos" y "malos", nuestras opiniones frecuentemente serán similares a las de otros bonsaistas, y el nuevo artista será calificado de acuerdo con eso.
Esto se aplica, en el mismo sentido, a los diseñadores de bonsái. Si resulta que llego a ser un maestro de bonsái, juzgaré mi propia obra con las mismas reglas abstractas de lo "bueno" y lo "malo" y produciré bonsáis que pasen mi propio criterio de juicio. Por lo tanto, una vez que se establece que ciertas obras son ejemplos de buen arte, casi queda garantizado que el modelo se perpetuará para futuros artistas y críticos. Esto va tan lejos que un número considerable de expertos y artistas de bonsái creen que sólo hay una manera de hacerlo "correctamente". Hay una fuerte tendencia al fundamentalismo; es algo inherente al sistema de cómo evolucionan los gustos en bonsái.
Existe actualmente en la apreciación de los bonsáis algo más, por supuesto, que este simple reconocimiento de modelos, pero ¿tenemos alguna manera de separar ambos?. Normalmente no existe un observador externo al sistema, y nunca podremos saber en qué medida nuestras preferencias estén sesgadas por la formación de modelos de reconocimiento que hemos recibido en el pasado. Pero recuerda el ejemplo anterior, cuando "sabíamos" exactamente lo que era moralmente bueno o malo y, de repente, una persona de otra cultura tenía un código moral muy diferente. La cuestión es si incluso somos capaces de escuchar a alguien que venga de otra cultura de bonsái. Si le escuchamos, ¿entendemos lo que está diciendo?. Probablemente no, en realidad, y, seguramente querremos permanecer en nuestro cómodo mundo del bonsái, bien establecido y definido, en lugar de cuestionarnos constantemente nuestras ideas. Y no nos damos cuenta de que lo que creemos que son reglas "naturales", simplemente evolucionaron casualmente y se convirtieron en un código de aceptación general. Pero, por azar podría haberse convertido en un código muy diferente.
No podemos llevar a una exposición de bonsái a una persona de la calle que nunca ha visto un bonsái ni la teoría sobre ellos. Bueno, sí podemos, pero ¿qué vamos a esperar?. La persona hará algunos juicios y dará alguna explicación, pero en realidad lo único que nos indicará es que tenemos frente a nosotros a alguien con un gusto muy ingenuo y sin experiencia. La forma artística es también un lenguaje en sí mismo, y sin estar expuesto a ella no se puede aprender ese idioma. Se cuenta la historia de una persona que se acercó a Picasso y le dijo: "Sr. Picasso, no entiendo su arte". Picasso le respondió: "¿sabes chino?". "No". "Pero se puede aprender chino".
¿Alguna vez sabremos, de alguna manera, la verdadera diferencia entre el elitismo perpetuado a través de reconocimiento de modelos y el valor intrínseco de un bonsái?.
Adaptado de: "Arte y elitismo: una forma de reconocimiento de modelos"
por Kunal Sen, 2007, blog Enciclopedia Britannica
Monday, January 24, 2011
Poda o corte de reducción - Spanish
Poda o corte de reducción - Spanish
Este artículo fue escrito en el verano de 2002 e impreso posteriormente en Internacional Bonsai.
Poda o corte de reducción
Por Walter Pall
Traducción: Pedro Herrera
En relación a la poda de árboles se pueden definir tres tipos de poda en general:
1) Poda de mantenimiento: ésta es la que se tiene que hacer ininterrumpidamente con cierta regularidad cuando se trabaja el árbol. Se realiza en todos los árboles, incluso en los terminados.
2) Poda de desarrollo: cuando un árbol está en la fase de desarrollo a menudo necesita podas más o menos drásticas que cambien y mejoren el diseño general.
3) Poda de reducción: cuando un bonsái se inicia procedente de un árbol natural son necesarios uno o varios cortes estratégicos para definir el futuro diseño básico.
En este artículo hablaremos de la poda de reducción. Se trata de un acortamiento drástico de un árbol que ya ha crecido durante algún tiempo. Esta es la intervención decisiva que hace de un árbol normal un futuro bonsái, o prebonsái. Puede proceder de un vivero o de un árbol cultivado en jardín o en el campo.
Incluso un árbol que procede de semilla o esqueje necesita eventualmente tal tipo de poda drástica, al menos una vez.
Durante la práctica de la poda de reducción el diseñador de bonsái trabaja como un escultor que elimina del bloque de piedra o madera todo lo que no es necesario. Lo que quede es la materia prima que se convertirá en un bonsái. Después de la poda el árbol se deja crecer libremente durante un tiempo. Después se seguirá diseñando con podas de desarrollo que pueden ser aún algo drásticas. En la etapa de refinamiento, por lo general, sólo se efectuarán podas de desarrollo y mantenimiento menores.
Hay tres métodos de poda drástica para obtener eventualmente un prebonsái:
1) Se deja crecer el árbol libremente hasta que es algo mayor de la altura deseada. Luego se forma la copa. Por lo general, la parte superior se cortará por completo y una rama alta se sube hacia arriba para formar el nuevo ápice. Esto asegurará buena conicidad en el área de la copa. La copa se formará con podas de desarrollo que aseguren no salirse de las proporciones. El verdadero problema es la ausencia de conicidad del tronco con este método. Este fallo principal es casi incorregible. Muchos aficionados mantienen tales árboles con copas agradables, pero con poca conicidad en el tronco. Esperan en vano, después de muchos años, obtener al final un bonsái verdaderamente bueno. Se puede intentar crear más conicidad en tales árboles dejando crecer libremente algunas ramas durante mucho tiempo. Aportando mucho alimento engrosarán el tronco y la base considerablemente. Se cortarán eventualmente todas las ramas, dejando una gran herida. Estas son las llamadas ramas de sacrificio. Si no se hace nada, difícilmente se desarrollará por sí misma una buena conicidad.
2) El segundo método consiste en árboles procedentes de semilla o esqueje. Se cortan pronto en un punto estratégico. Con la rama más alta se continuará después el eje del tronco. Se pueden formar ángulos agudos en el eje del tronco o crearlos rectos, pero disminuyendo el grosor de los troncos para árboles en forma vertical formal. Hay que tener en cuenta que los ángulos del eje del tronco se corregirán en el árbol a lo largo de los años. Lo que era un tronco con varias curvas al principio, con el tiempo se hará mucho más recto por los mecanismos de crecimiento del árbol. Este método es largo, pero efectivo. Es el método profesional de los grandes viveros de bonsái. Una desventaja es que los árboles al final se parecerán demasiado, incluso en cierta medida serán todos iguales y, a menudo bastante aburridos.
3) A veces se puede obtener un bonsái excelente con un tercer método. Se buscan árboles que hayan crecido durante bastante tiempo y que sean apropiados para una poda drástica. En algunos árboles recolectados la naturaleza les ha hecho crecer de tal forma que con un corte apropiado se puede obtener un buen bonsái con buena conicidad y buena posición de ramas. Con las coníferas a veces se puede crear un bonsái de forma instantánea con dicha poda drástica. Normalmente habrá que añadir, sin embargo, un largo periodo de desarrollo y refinamiento. Por lo general, lleva muchos años o incluso décadas para un árbol caducifolio. Con este método se crean con frecuencia bonsáis muy interesantes y a veces sobresalientes.
En principio, el corte de reducción se puede hacer en cualquier lugar del tronco. Es sólo una cuestión de lo que quiera obtener el aficionado al bonsái. Por supuesto, también depende de las propiedades de las especies utilizadas. Los árboles caducifolios a menudo se pueden cortar incluso por debajo de la rama más baja, aún sin haber brotes visibles. Siempre se debe considerar seriamente utilizar esta opción cuando una rama está colocada en un lugar favorable en el que se pueda cortar y obtener la rama que podría convertirse en eje del tronco.
El ángulo de corte es importante. Por lo general se recomienda cortar en diagonal. La diagonal se elige de forma que se disminuya el cambio drástico de conicidad, por lo general entre el tronco y el nuevo ápice. Es muy importante decidir el frente definitivo antes de efectuar el corte. Por lo general no se desea ver el corte desde el frente porque si es muy grande creará para siempre una cicatriz o agujero horribles. Esto llamará la atención y será siempre indicativo de la intervención artificial. A veces, sin embargo, se quiere incluir un gran agujero en el diseño de árboles caducifolios. Entonces el corte puede estar delante. Las coníferas generalmente se diseñan con madera muerta de todas formas. Así que el corte drástico se puede utilizar a menudo para aprovechar el diseño general fácilmente. El frente se decidirá por el nebari, la línea del tronco y la posición de las ramas, si las hay. Además, se podría cambiar ligeramente la posición del gran corte de reducción.
Un corte diagonal inmediato, sin embargo, a veces tiene desventajas decisivas. Si la primera poda de reducción se hace inmediatamente en diagonal, por lo general se va a morir de nuevo una parte importante o el tronco. El corte en árboles caducifolios y en coníferas en los que no se plantea un jin superior debería ser primero horizontal y luego al árbol se le debe dejar que haga su propio diseño. Parte del tronco se secará nuevamente, algunos brotes se desarrollarán. Después de unos meses o en el siguiente período vegetativo se puede ver cómo ha crecido el árbol y entonces finalmente cortar en diagonal. Uno se queda con tantos brotes ya existentes y desarrollo del callo, como pueda. Este método también tiene la ventaja de tener muchos brotes vigorosos que dan mucha fuerza, cerrando así la gran herida más rápidamente.
En coníferas es mucho más fácil que la poda de reducción obtenga buenos resultados inmediatos que con árboles de hoja caduca. Es muy importante, por supuesto, asegurarse que permanezca una cantidad suficiente de verde en el árbol. Por lo general, se tenderá a crear un jin superior con una parte del tronco original. Entonces el punto de corte puede estar, o debería estar, en el frente. Un árbol con un jin superior siempre debe tener algo de madera muerta adicional en otras partes del árbol con el fin de parecer natural.
La altura del corte depende de su finalidad y las circunstancias. A excepción de la forma Literati, generalmente se desea un tronco bastante grueso en relación a la altura del árbol. Se debe saber la altura final prevista del bonsái. Esto no es lo mismo que la altura del corte, por supuesto. Hay que añadir el crecimiento de la copa. Una buena proporción de un bonsái es una relación 1:6 de anchura del tronco respecto a la altura definitiva del árbol. Por tanto, el primer corte se puede establecer a una altura que es de tres a cinco veces el ancho del tronco. El diseñador debería pensarse mucho esto, porque ésta será la medida de diseño más crucial en la vida de un bonsái. Para ello, puede ayudar un dibujo con las medidas. Un buen método para predecir el efecto es tomar un pañuelo o papel para ocultar la parte del árbol que se desprenderá. Por cierto, los aficionados suelen cortar demasiado alto. Esto significa que tienen que vivir con malas proporciones para siempre o que el corte correcto se tendrá que hacer posteriormente.
Una reducción extrema sería situar el corte horizontal directamente sobre la superficie de enraizamiento. Esto sólo se puede hacer con las especies de árboles caducifolios, que se sabe que brotan con facilidad. Si el árbol estaba sano antes de la poda, aparecerán numerosos brotes en el borde del corte. Más tarde serán diseñados en la forma multitronco o grupo. Dado que todos los brotes son de la misma edad también tendrán aproximadamente el mismo grosor. Hay que tener cuidado de que algunos troncos seleccionados se puedan desarrollar mejor que los otros y por lo tanto ser claramente más gruesos.
Para las heridas grandes, la técnica actual es dejarlas sin sellador, porque ésto no ayuda y puede incluso causar daños. Es una ventaja si la herida se encuentra a pleno sol, porque se curará más rápido. Al menos una de las ramas por encima de la herida debería crecer libremente durante algún tiempo. Esto asegurará que fluya la suficiente energía hacia abajo para crear el callo que cierre el agujero.
Si se ha colocado un corte horizontal en primer lugar, entonces se continuará con un corte diagonal después de que los brotes hayan aparecido. Sólo se debe cortar cerca de la yema o brote terminal en el período más activo de finales de la primavera y principios del verano. En cualquier otro momento el brote o retoño que estaba destinado a convertirse en el nuevo líder puede secarse. Por lo tanto el corte se coloca de modo que se deja un muñón que se secará y se suprimirá cerca del brote vivo en el siguiente período vegetativo con una herramienta de corte. Sin embargo, con muchas especies de hoja caduca no hace falta tener ese cuidado. Esto es especialmente cierto con árboles muy jóvenes. Por lo general aparece un nuevo ápice cuando el viejo se seca. De cualquier forma, es posible que el modelo planificado se destruya y se tenga que trabajar con un nuevo ápice que sea inferior al planeado. ¡Esto a menudo puede ser una ventaja!.
Por lo general también algunas ramas gruesas se tienen que quitar durante la poda de reducción. En caso de duda, se quitan las ramas que se encuentren en el interior de una curva. Se debe conseguir acortar las ramas en un punto donde una ramilla primaria con una línea agradable pueda hacerse cargo del nuevo eje de la rama. Si una rama se divide en tres ramillas en un punto, casi siempre es buena idea quitar la central y seguir trabajando con las otras dos. En la parte inferior de la copa, las ramas gruesas se dejan mientras que en la parte superior se quitarían y seleccionando las ramas delgadas.
Después de cortar el ápice y las ramas gruesas, el árbol debe alimentarse bien. El resto de ramas y los nuevos brotes pueden crecer libremente durante una temporada. Esto hará que las heridas se curen más rápidamente y también se reducirán los más o menos inevitables cambios drásticos de conicidad.
Después del primer corte, que se colocó lo más abajo posible, el árbol se dejará crecer libremente durante un período vegetativo. El siguiente corte tendría que ser, de nuevo, tan bajo como sea posible. Por lo general, tiene ventajas colocarlo en el lado opuesto al primer corte. También es posible desarrollar coníferas jóvenes de esa manera, siempre y cuando se tenga cuidado de dejar siempre el suficiente verde y brotes en lo que queda después de la poda.
No es absolutamente necesario planificar exactamente la evolución del diseño con el tiempo. Se puede cortar y darle al árbol la oportunidad de crecer de forma aleatoria. En los próximos años el árbol se poda como un seto, sólo teniendo en cuenta la silueta, no la estructura. Luego, después de unas temporadas el árbol se trasplanta y se trabaja a partir de ahí y seleccionando la mejor de las posibilidades que se hayan desarrollado. Esto es básicamente lo que hace la naturaleza cuando los árboles son pastados por los animales. Los animales ramonean indiscriminadamente los árboles a principios de primavera y lo repiten todos los años. Al cabo de muchos años se desarrollan arbolitos muy interesantes que tienen muy buena ramificación y las opciones de diseño más interesantes.
Los animales desde luego no quieren diseñar bonsáis, sólo comer. Así, al azar, se desarrollan formas mucho más interesantes que si alguien hubiera tenido en cuenta cada corte.
Cuando los árboles tienen raíces débiles y se trasplantan o se plantan en tierra a menudo no es una buena idea podarlos de inmediato. Es mejor dejarlos que se establezcan y desarrollen primero un buen enraizamiento. En un árbol con raíces débiles no brotarían todas las yemas. Algunas se secarían y algunos brotes se secarían después de su aparición. Un árbol sólo puede abrir y desarrollar el número de brotes que puedan ser sustentados por las raíces. Por lo tanto, se dejarán solos durante un año y cuando las raíces se hayan desarrollado bien, se puede podar drásticamente.
Si se quieren desarrollar troncos muy gruesos es mejor esperar unos años. Los árboles que crecen en el campo pueden alcanzar unos metros de altura antes de podarlos. Con el fin de alcanzar un diámetro de tronco de 10 cm para el bonsái definitivo, la materia prima en el momento de la poda de reducción deberá tener ya un diámetro de 7 cm.
Las podas de reducción continuarán hasta que las grandes heridas hayan sanado y se establezca la estructura general de las ramas principales. Sólo entonces llega el momento de plantar el árbol en una maceta más pequeña. A partir de entonces sólo crecerá muy lentamente. Ahora empiezan las fases de desarrollo y refinamiento.
Habría que considerar que durante el largo periodo de tiempo de desarrollo del material de bonsái, el diseñador de bonsái también evoluciona. Por lo general, al principio, se quieren diseñar árboles bien definidos, "bonitos". Al cabo de unos años esto se vuelve aburrido, porque los árboles son todos iguales ("bonsáis cortados en serie"). Uno empieza a interesarse en formas nuevas y más interesantes. En ese momento, los árboles que se iniciaron unos años antes estarán listos para su refinamiento. Lamentablemente, entonces, son demasiado aburridos para los aficionados de bonsái avanzados. Por esta razón uno debería desarrollar material que parezca, de momento, suficientemente versátil.
Monday, January 17, 2011
Sellado de heridas en los árboles - Spanish
Sellado de heridas en los árboles - Spanish
Esto lo escribí en Bonsainut en enero de 2009
Autor: Walter Pall
Traducción: Pedro Herrera
Uno podría pensar que la cuestión del sellado de heridas es algo que puede ser resuelto fácilmente escuchando a los profesionales que se pasan la vida podando árboles y a los científicos que hacen las investigaciones en que se basan las prácticas hortícolas. Como se puede ver, no resulta tan simple. Hay peleas sobre esto en los clubes de jardinería. Hay peleas sobre esto en la sección local de los periódicos cuando se podan árboles en un parque. En los círculos de bonsái esto es como una cruzada. ¿Cómo es posible que algo que no tendría que dejar dudas debido a su obvia simplicidad cause tales disputas?.
La principal razón desde mi punto de vista es que la gente en general no tiene ni idea, o casi, del funcionamiento de una planta, mientras que tienen una idea general de cómo funciona el cuerpo humano. Saben que si una persona tiene una gran herida que no se trate, no es muy saludable. Saben que se debe evitar que se gangrene si se trata de un mamífero. Si yo sufriera una gran herida y quedara abierta sin tratamiento, no sería saludable. Si yo dijera que me abandonaran porque cualquier tratamiento sería perjudicial, me llamarían loco o ignorante, y con razón. Y lo mismo debería ser verdad con los árboles, y la tierra es plana. Los selladores de heridas se basaron y todavía se basan en este enorme malentendido. Entonces llegó el Dr. Shigo y revolucionó el mundo de la horticultura. Sus investigaciones descubrieron algo que se llama CODIT (porque la mayoría de la gente no podría deletrear o pronunciar la palabra compartimentación). En pocas palabras dice que los árboles impiden que la podredumbre avance de dentro hacia fuera. Forman compartimentos con fronteras químicas y físicas. Estos compartimentos se inician en el centro del tronco y hay varios en anillos hacia el exterior. Mientras el compartimento central se pudrirá en algún momento, la putrefacción no continuará fácilmente al compartimiento contiguo. Ocurrirá en alguna ocasión, pero en la parte exterior el árbol crecerá y formará nuevos compartimentos. Incluso si todos los compartimentos interiores se pudrieran todavía habrá uno más exterior, donde la vida va a seguir creciendo. Este proceso normal es tan lento que un árbol crecerá lejos de la podredumbre con éxito durante muchos cientos e incluso miles de años. Casi todas las coníferas muy viejas en la naturaleza se pudren desde dentro. Pero no mueren debido a la compartimentación.
El Dr. Shigo encontró que las personas que "ayudan" a los árboles más o menos profesionalmente cometían dos errores:
1) Cortaban las ramas a ras del tronco y con ello hacían que se abrieran grandes heridas en varios compartimentos. Así, por otra parte, crean el peligro de que los compartimentos sanos sean fácilmente invadidos por toda clase de gérmenes, principalmente hongos y finalmente se pudran.
2) Los selladores de heridas tal como se aplican convencionalmente están destinados a evitar la pudrición de las partes internas del árbol. Encontró que precisamente ocurría lo contrario. En primer lugar, en la naturaleza no hay manera de prevenir tal clase de hongos o bacterias en una herida reciente. Si algún jardinero inocente cree que puede evitar esto, simplemente no sabe lo suficiente. Si la sellas estás creando un ambiente ideal para que estos gérmenes hagan su trabajo. Necesitan calor y humedad, que consiguen mucho mejor con un sellador que sin él. Así que el Dr. Shigo revolucionó la horticultura afirmando que los selladores para heridas son superfluos e incluso pueden ser perjudiciales.
Al Dr. Shigo se le considera un hito en la ciencia de la horticultura por sus descubrimientos. Un estudiante de horticultura que nunca haya oído hablar de él es un ignorante. Una persona que cree que él puede luchar contra décadas de estudio científico de los mejores talentos del mundo, con sólo el sentido común, es un tonto ignorante. Un jardinero que pretenda no haber oído hablar del Dr. Shigo y no pueda pronunciar la palabra compartimentación en el mejor de los casos una persona muy simple o un charlatán.
Pero el mundo no ha cambiado demasiado. Actualmente, en horticultura, es una práctica aceptada seguir al Dr. Shigo, pero muchos no lo hacen. Bueno, lo cierto es que alguien se sale con la suya porque se necesitan años antes de que los resultados se manifiesten y mientras tanto se puede ganar dinero ignorando al Dr. Shigo. ¿Cómo?. Bueno, corta ramas grandes en un parque público y no las trates con nada y verás que la gente se avalanza sobre tí. "Saben" que estás haciendo algo incorrecto. La gente te pide que trates sus árboles del jardín y vas y les dejas grandes heridas abiertas. Pensarán que no sabes lo que haces. Así que hay muchos charlatanes que ponen selladores en heridas grandes para ganar dinero y hacer que la gente se calle. Estos charlatanes saben que en realidad no debe hacerse esto, pero es bueno para ellos y no tan malo para los árboles, por lo menos no inmediatamente. Y luego hay algunos que no se han molestado en seguir aprendiendo después de la enseñanza básica en horticultura. Están haciendo las cosas como solíamos hacerlas hace treinta años. El problema es que la gente prefiere escucharles a ellos en lugar de a la ciencia.
¿Qué tiene esto que ver con el bonsái?
Bueno, nosotros hacemos grandes heridas en los árboles constantemente. ¿No se deberían aplicar todos los descubrimientos del Dr. Shigo?. Mi opinión es que sí.
Hasta aquí, la teoría. Ahora, vayamos a la práctica. ¿Qué hago personalmente después de décadas de estudio?.
Sé que estoy dañando compartimentos si hago cortes como los que se hacen habitualmente en bonsái, es decir, cerca del tronco e incluso con un cortador cóncavo, lo que es incluso peor, como han señalado algunos. Elijo hacer esto porque todavía no va a matar al árbol. Creará compartimentos podridos pero NO MATARA al árbol. Los árboles pueden estar completamente huecos y aún seguir muy vivos. Los árboles grandes en la naturaleza pueden estar en peligro debido a la pérdida de estabilidad. Con los bonsáis esto no es problema. Cuando hago cortes grandes por lo general me aseguro de que la herida NO sea regular como se recomienda en bonsái. Se formará callo y con heridas muy grandes, siempre habrá un agujero. Con heridas más pequeñas, siempre habrá una cicatriz. Quiero asegurarse de que el hueco o la cicatriz parezca natural, es decir, nunca redonda como la que hace una herramienta de corte. Hago a propósito muescas toscas en los bordes de una herida.
En relación a los selladores hay una enorme diferencia entre coníferas y no coníferas. Las coníferas, en general, no se pudren fácilmente porque ya tienen el mejor protector, que es la resina. Los árboles caducifolios se pudrirán mucho más fácil, pero sé que los agujeros se pudrirán incluso más al "protegerlos". Bueno, para sorpresa de muchos, yo generalmente quiero que mi agujero se pudra. Normalmente quiero grandes huecos de aspecto natural en mis bonsáis. Así que bien podría utilizar sellador para que los agujeros se pudrieran. Pero como sé que el sellador es superfluo, no uso ninguno. EN GENERAL.
Utilizo sellador en algunos cortes donde veo riesgo de que se deseque rápidamente. Es el caso, a veces, de algunos arces sensibles. A veces rompo ramillas accidentalmente y pienso aún tienen oportunidad de curarse. Entonces pongo un poco de sellador a la herida para prevenir la deshidratación. Uso sellador que desaparecerá por sí mismo después de unos meses y que es barato y no muy visible: GRASA PARA ORDEÑAR. Tengo muy cerca una tienda de artículos de granja en la que puedo obtener esta grasa por poco dinero. (Sí, es la grasa que se pone en las manos al ordeñar las ubres de la vaca). Es casi invisible, funciona como la vaselina y se mantiene alrededor de un año antes de desaparecer. Y ciertamente no es venenosa. Y oculto a veces, obviamente, las heridas frescas para camuflarlas un poco.
¿Qué le digo a la gente que insiste aún en el sellado de cada herida en un bonsái? Bueno, adelante si te hace sentir bien, pero sé consciente de que es más por TI que por el árbol. Y no creas que quien te dice que él utiliza selladores es la mejor persona.
Amén.
Sunday, January 16, 2011
¿Y si el estilo "tradicional" de bonsái no existiera? Spanish
¿Y si el estilo "tradicional" de bonsái no existiera?
Publicado en
Art of Bonsai Project como "Eristic"
¿Y si el estilo "tradicional" de bonsái no existiera?
por Walter Pall
Traducción: Pedro Herrera
Varias observaciones me han llevado a concluir que no existe UN tal estilo tradicional de bonsái. Tradicional se utiliza muy a menudo como sinónimo de clásico.
Veamos cómo se ha manifestado el bonsái "clásico" a lo largo del tiempo. ¿Dónde podemos hacer esto?. Bueno, se puede hacer observando las ediciones de los libros de la Kokufu-ten a lo largo de los años. Si tienes la oportunidad de ver alguno anterior a la II Guerra Mundial te sorprenderá que la mayoría de los árboles que se muestran allí no se parecen en nada a lo que la mayoría ve actualmente como bonsái "clásico". De hecho, actualmente la mayoría se podrían considerar de inferior calidad. Trasladémonos ahora a las ediciones posteriores a la guerra. Encontramos que al final de los años cincuenta y mediados de los sesenta los bonsáis expuestos a menudo se parecen a lo que se considera actualmente "estilo clásico tradicional de bonsái" por mucha gente en Occidente (!pero no en Japón!). Avanzando en el tiempo los bonsáis tienen un aspecto diferente de nuevo. Y en las ediciones de los últimos diez años se ven muy diferentes otra vez.
Lo que la mayoría llamaría LOS árboles clásicos son realmente los árboles de finales de los años setenta a finales de los ochenta. Comparado con otras formas de arte esto resulta muy reciente para ser llamado "clásico". Pero para algunos es tiempo suficiente.
Mirad las creaciones de las personas que fueron instruídas muy recientemente en Japón. ¿Se parece esto a lo que hemos aprendido a considerar estilo de bonsái "tradicional"?. La mayoría de las veces no es así. Ni siquiera estoy hablando de los jóvenes que han estudiado con Kimura. Ni tampoco hablo de los que pretenden ser muy contemporáneos. Estoy hablando de los que insisten en que lo que han aprendido y practican es bonsái "tradicional".
He tenido el placer de entrevistar públicamente a Kimura en una demostración hace dos años. Una pregunta se refirió a "¿en qué es tan diferente su estilo a lo que hemos aprendido a llamar tradicional?". Kimura insistió en que lo que estuvo y está haciendo es "tradicional". Insistió en que él está en la línea clásica y que quizá todo consista en una mayor atención a los detalles, al refinamiento. Bueno, yo no creo eso en absoluto.
Pero en qué consiste el bonsái "tradicional clásico" si se trata de apariencias radicalmente tan diferentes?. E incluso atreviéndose a cambiar, a progresar.
Las palabras tradicional o clásico significan algo estable para la mayoría. Algo a lo que volver la mirada e incluso admirar para siempre. ¿Cómo es que las que suelen llamarse obras maestras clásicas cambien constatemente?. Se supone que no. ¿O sí?.
¿Cómo es que hay claramente un aspecto diferente entre lo que se crea en Occidente (fuera de la influencia japonesa directa) y llamado "tradicional", y lo que sale de Japón hoy en día, también llamado "tradicional"?.
Creo que podemos ver bastantes estilos más o menos radicalmente diferentes bajo el título de "tradicionales".
Yo por lo menos veo claramente dos: el Estilo Tradicional Occidental y el Estilo Tradicional Japonés.
Si esto te sorprende, estás en buena empresa. A mí también me sorprende.
Saturday, January 15, 2011
Estilos y formas - Spanish
Estilos y formas - Spanish
Este texto fue escrito originalmente hacia 1998 y revisado en 2001. Esta es la versión revisada. Fue publicado en Internacional Bonsai. Este artículo se publicó en la temprana lista del CIB en internet. Hubo mucha controversia. Fue prejuzgado por personas que dijeron que se trataba de un intento inútil. Hoy en día, unos 10 años más tarde, parece un poco anticuado, pero ahora la terminología es aceptada por muchos.
Estilos y formas
Un intento revisado para la clasificación
Estilos y formas
Un intento revisado para la clasificación
por Walter Pall
Traducción: Pedro Herrera
Si nos fijamos en los estilos tradicionales del arte encontramos, por ejemplo, el romano, el gótico, el renacentista, el barroco, y una serie de estilos modernos. En todos estos estilos se construyeron iglesias, edificios oficiales, viviendas particulares, etc.; se hicieron pinturas y esculturas. En cada uno de ellos se puede ver claramente que pertenecen a una categoría, pero se hicieron en diferentes estilos. Una iglesia pudo construirse en estilo gótico o en estilo renacentista, pero siempre era una iglesia. No hay un "estilo de la iglesia". Hablamos del estilo para denotar las características comunes de las obras de arte de una época, de una región, de un artista o de un grupo de artistas. Se trata de un término abstracto que ayuda a clasificar el arte. Estilo significa el "enfoque" a un tema y no una categoría. En pintura no existe el "estilo de hombre de pie" o el "estilo de mujer en una silla". Si uno se pone frente a una pintura y pregunta: "¿de qué estilo es?", la respuesta nunca sería "hombre sentado" . Estas son las formas o géneros, que se pueden pintar en numerosos estilos diferentes (por lo general bien documentados y descritos), pero el tema siempre será reconocido en su forma.
En bonsái no es diferente, pero la terminología común mezcla estilos y formas. Un bonsái "vertical informal" se puede diseñar de muchas maneras distintas que pueden variar considerablemente, pero siempre será reconocido como la misma forma. Tenemos una palabra para la forma, pero realmente no para los diferentes estilos, ya que la idea subyacente en general es que sólo un estilo, el clásico, existe. El uso de la palabra forma o estilo varía en la mayoría de las publicaciones de bonsái. A menudo, estas palabras parecen ser utilizadas como sinónimos.
Un estilo en el mundo del bonsái no es lo mismo que en el mundo del arte en general. Si bien estamos acostumbrados a esto, no es necesariamente correcto, ni es útil. Los orígenes de esto puede venir de las traducciones del japonés al inglés y otros idiomas. También puede provenir de los primeros autores de bonsái que sabían algo acerca de los bonsái, pero no tanto sobre la historia del arte, al igual que los primeros traductores. También podría ser que a los japoneses no les importara la terminología tanto como a nosotros. En "bonsái clásico de Japón" las palabras estilo y forma a veces se utilizan como sinónimos. En China, el término "escuela" se utiliza para indicar estilos diferentes. La palabra "escuela" se podría utilizar en este contexto por el término "estilo" como se hace referencia en este artículo. Alan Walker sugirió utilizar el término "escuelas de diseño", que derivan del Ikebana, que se ha extendido por todo el mundo y que, fuera de Japón, se han desarrollado varios estilos específicos, que van más allá del Ikebana tradicional, que son reconocibles y tienen nombres. Los estilos se desarrollan y pasan de una fase temprana a una fase de alto nivel al final de una última etapa en la que las cosas se están convirtiendo en exageradas.
¿Por qué debería ser diferente en el bonsái que en todas las otras formas de arte?.
Quien ve un bonsái, quiere clasificarlo. Tradicionalmente queremos clasificar en un solo "estilo". Con muchos bonsáis se tienen problemas. Estos problemas han aumentado en la última década con el surgimiento de nuevos "estilos" o variaciones de "estilos". Personas de diferentes culturas practican el arte del bonsái y aportan nuevos detalles e incluso nuevos "estilos" que ni siquiera tienen un nombre todavía. El arte del bonsái se ha extendido actualmente por todo el mundo, se introducen nuevas especies que no son tradicionales todavía. A menudo nos encontramos frente a un bonsái y encontramos que es muy difícil o imposible asignarle un "estilo". ¿Es esto un bonsái defectuoso, o es que nuestro esquema de clasificación es incorrecto y necesita mejorar?
Hay que diferenciar entre estilos y formas en el arte del bonsái. Ambos son de uso común como si fueran lo mismo.
Hay que diferenciar entre estilos y formas en el arte del bonsái. Ambos son de uso común como si fueran lo mismo.
La forma se decide por lo que resulta más evidente a primera vista al espectador. Esto no es diferente de las categorías tradicionales japonesas. Lo que es diferente en este esquema que se propone es que un bonsái puede tener varias formas al mismo tiempo. Esto no es realmente nuevo, siempre fue así, pero nunca se reflejó claramente en la clasificación tradicional. Las formas pueden ser diferenciadas en categorías de la siguiente manera:
Según la dirección del tronco: vertical formal, escoba formal (una forma de subvertical formal), vertical informal, escoba informal, inclinado, cascada (completa y semi).
Según el número de troncos: tronco único, multitronco o grupo.
Según la tendencia de la copa: a un lado (azotado por el viento), ramas en ambos lados.
Según el medio de plantación: en maceta, sobre piedra, sobre losa, en roca, sobre roca, con raíces sobre el sustrato de la maceta.
Según el aspecto estacional: árbol de invierno (sin hojas) y árbol de verano; puede ser de flor o de fruto.
Según el espesor del tronco en comparación con la altura del árbol: tronco delgado (llamado "estilo" Literati, hasta el momento), tronco normal o tronco grueso.
Según la cantidad de madera muerta utilizada en el diseño: mucha madera muerta (llamado estilo de madera dominante, hasta ahora), poca o ninguna madera muerta.
Hay más categorías aún por definir o descubrir. Charles Ceronio realizó la tarea de recopilar y describir minuciosamente todas las forma imaginables. Ha detectado un buen número que todavía no forman parte del vocabulario común del bonsái.
Según la dirección del tronco: vertical formal, escoba formal (una forma de subvertical formal), vertical informal, escoba informal, inclinado, cascada (completa y semi).
Según el número de troncos: tronco único, multitronco o grupo.
Según la tendencia de la copa: a un lado (azotado por el viento), ramas en ambos lados.
Según el medio de plantación: en maceta, sobre piedra, sobre losa, en roca, sobre roca, con raíces sobre el sustrato de la maceta.
Según el aspecto estacional: árbol de invierno (sin hojas) y árbol de verano; puede ser de flor o de fruto.
Según el espesor del tronco en comparación con la altura del árbol: tronco delgado (llamado "estilo" Literati, hasta el momento), tronco normal o tronco grueso.
Según la cantidad de madera muerta utilizada en el diseño: mucha madera muerta (llamado estilo de madera dominante, hasta ahora), poca o ninguna madera muerta.
Hay más categorías aún por definir o descubrir. Charles Ceronio realizó la tarea de recopilar y describir minuciosamente todas las forma imaginables. Ha detectado un buen número que todavía no forman parte del vocabulario común del bonsái.
Esto no significa dejar obsoletas las formas o "estilos" japoneses bien conocidos. Todos están incluidos en este esquema. La diferencia es sólo que se les ha dado un orden más lógico y se han añadido algunas otras formas. Es perfectamente correcto seguir utilizando los términos tradicionales japoneses, pero no es necesario y no hace la clasificación más clara.
Todos los aficionados serios de bonsái son conscientes de las normas de diseño de las formas principales. A veces se producen irritaciones cuando no se respetan estas normas e incluso cuando se citan de forma diferente por distintos autores. Lo que muchos no saben, es que la norma de una forma se ve influida por el estilo general que se utiliza. Las normas para el diseño de bonsái en cierta medida cambian de acuerdo con el estilo aplicado. Por lo tanto, si uno opta por trabajar en el estilo clásico y quiere diseñar una conífera vertical informal, aplica las reglas japonesas bien conocidas. Si uno quiere trabajar en estilo contemporáneo, las reglas son diferentes, pero generalmente no están (todavía) bien definidas. Esta es la idea central de todo este esquema: !las reglas de diseño de una forma dependen del estilo subyacente elegido!
En "bonsái clásico de Japón" se hace una clara distinción entre lo que se denomina enfoque "visual" y "abstracto" de bonsái. El enfoque visual hace hincapié en el aspecto objetivo y la forma del bonsái. Esto ha predominado entre los japoneses y en todo el mundo occidental. La forma en que un árbol crece y la forma en que se ha formado en una composición artística, en términos estéticos, la forma y el diseño son la ocupación principal del enfoque visual. Por otro lado está el enfoque abstracto a la apreciación de los árboles en miniatura y paisajes, un enfoque que, si bien encuentra el placer en los objetos mismos, rechaza firmemente la preocupación excesiva con, o la insistencia en, las formas o los aspectos. Está menos preocupado por la apariencia física de los bonsáis que con su espíritu. Hablar de aproximaciones visual y abstracta, no hace más que describir diferente énfasis en la apreciación, y los dos no son mutuamente excluyentes. Este concepto, descrito en una publicación oficial de la Nippon Bonsai Association es más o menos lo mismo que la distinción entre forma y estilo como aquí se describe. La forma es la parte visible de un bonsái, el estilo es lo referente a la filosofía, al espíritu del árbol. Lo primero es el estilo, el espíritu, luego viene la forma.
Hay cuatro categorías de estilo (pero hay aún más por definir):
Clásico y Contemporáneo
Clásico: Este es el estilo que se asocia comúnmente con los "buenos" bonsáis. Estos son los árboles que se ajustan a las normas japonesas bien conocidas. Por lo general son ligeramente expresionistas y abstractos. Esto significa, que el diseñador no trata de dar la impresión de un árbol real, sino más bien tiene un sentimiento interno del árbol ideal, que él expresa. Esto siempre se aplica a las coníferas. Los árboles de hoja caduca son a menudo naturalistas y menos expresionistas. Un buen artista clásico es visto como alguien que utiliza (copia) las formas clásicas y se ajusta a las normas clásicas en la medida de lo posible.
Yuji Yoshimura ha dado un excelente panorama histórico del desarrollo del arte del bonsái. Según él, el desarrollo del bonsái clásico comenzó alrededor del año 1.600, con un primer período que duró hasta 1.800. El período medio clásico, desde 1.800 hasta 1.950, trajo un considerable refinamiento. El período clásico tardío dura desde 1.950 hasta hoy. En este período el refinamiento ha llegado a nuevas cotas. Yoshimura ve la mayoría de los bonsái que no fueron diseñados o mantenidos en Japón, fuera del grupo clásico, ya sea en el estilo neo-clásico o contemporáneo.
Está el estilo de bonsái clásico-temprano, que sólo puede estar en las formas que fueron aceptadas antes del siglo 19: vertical formal, vertical informal, inclinado, cascada, tronco único, multitronco, grupo y sobre roca. En el siglo 19 la forma Literati se introdujo en Japón. En el siglo 20 se desarrolló la forma de escoba formal.
Yoshimura ve la mayoría de los bonsái que se realizaron en una especie de moda clásica fuera de Japón, como de estilo neo-clásico. Estos son "los bonsái que se han creado sobre la base de la sensibilidad estética japonesa y los fundamentos de bonsái clásico, pero que van más allá del marco de los bonsáis clásicos del pasado y se han creado a través de la subjetividad del individuo".
El estilo clásico se está repitiendo en Occidente desde hace un par de décadas una y otra vez. No se le ha añadido nada, realmente. Las formas a menudo se convirtieron en un cliché estereotipado. Las reglas clásicas, que deberían ser realmente directrices, fueron seguidas, demasiado a menudo, rígidamente e incluso mal interpretadas. Se convirtió en práctica común diseñar árboles de hoja caduca como si se tratara de coníferas. Esto está tan extendido que un árbol de hoja caduca naturalista parece desagradable para la mayoría de los aficionados del bonsái occidentales. Se han acostumbrado tanto al alto nivel de abstracción de los árboles clásicos que un bonsái de aspecto natural parece extraño. Muchos aficionados del bonsái occidentales no son conscientes de que un gran porcentaje de los bonsáis de hojas caducas en Japón no se diseñan como una conífera, sino más bien en un estilo naturalista. Los "especímenes" de árboles que se exportan son, sin embargo por lo general, diseñados de una manera estereotipada. Esto se debe a que resulta más barato desarrollarlos de esa manera y el público occidental espera que se vean de esa manera. También las coníferas se diseñan frecuentemente con ápices cónicos en Occidente, que a veces es apropiado, pero más a menudo es un frecuente malentendido de las normas clásicas. La mayoría de los buenos bonsáis clásicos en Japón tienen ápices redondeados.
Así, el término neo-clásico se utiliza a menudo de una manera despectiva, es decir, un bonsái, que se diseña como un cliché, que es una copia de una copia de una copia. Y la calidad se deteriora con cada copia. Los bonsáis en cierto modo parecen todos iguales, como si se tratara de cortar con un molde para galletas, "bonsái galleta cortada".
Hay una tendencia en Japón recientemente a árboles de hoja caduca pesados en relación a la maceta. Especialmente, se ven enormes arces tridentes en macetas muy poco profundas. Un fenómeno similar es la exageración de un nebari poderoso. Hay algunos arces tridentes con un nebari que ha cruzado la frontera a lo grotesco. Estos son desarrollos extremos. Una maceta más superficial y un nebari más fuerte hacen al bonsái más potente. Así que esto es lo que se hace. Pero existe un punto óptimo, más allá del cual se empeora de nuevo. Es típico que un estilo artístico vaya a los extremos en un período posterior. El debate está abierto si estos arces tridentes grotescos son neo-clásicos o sólo muy tardo-clásicos.
El clásico es un período en la historia del arte en el que se llega a un cenit de desarrollo artístico. Un periodo en el que sólo se repite lo que se desarrolló en un período clásico, sin añadir nuevos aspectos, se llama clasicismo en la historia del arte, o neoclásico. En cierto modo se podría estar de acuerdo con Yoshimura y ver lo que la mayoría de los occidentales, en general, están practicando como arte del bonsái como neo-clásico. Este es un término peyorativo en cierta manera, que, sin embargo, expresa bien el sentimiento de algunos artistas que se están volviendo más y más alérgicos contra la apariencia clásica. Algunos incluso están empezando a ver los bonsáis clásicos como de moda antigua. Esto es normal durante un tiempo de cambio. Este estado de ánimo es necesario para empezar a cuestionar las tradiciones y para atreverse a hacer cosas completamente nuevas. No significa en absoluto que los bonsáis clásicos sean realmente anticuados. Clásicos, en el sentido de valor comprobado a través del tiempo; honorables y tradiciones desarrolladas, y un patrimonio a admirar; siempre significará esto para el sabio artista de vanguardia.
Habría que señalar aquí que los árboles chinos no suelen caer en lo que normalmente se llama categoría clásica, ya que este ésta es específicamente clásica japonesa. Los Penjings tienen su propia apariencia clásica, que ahora, cada vez más, vuelve a aparecer en los bonsáis contemporáneos occidentales. Los Penjings clásicos son mucho más naturalistas, impresionistas y, a menudo son trascendentales. Es interesante observar que los bonsáis modernos y contemporáneos, en China y otros países asiáticos, parecen crearse más de acuerdo con el estilo clásico japonés. Este es ciertamente el caso de los bonsáis en Taiwan, donde por ejemplo, uno puede ver bonsáis de Ficus extraordinarios que parecen un pino enorme; son neo-clásicos.
!Clásico y clasicista no son lo mismo!. Diccionario Webster: clásica: de primera o máxima calidad, clase o rango, una pieza de trabajo clásica; clasicista: perteneciente o relativo a un estilo de la literatura y el arte que se caracteriza por la conformidad con los tratamientos establecidos, el gusto, o las normas fundamentales, y por la atención a la forma con el efecto general de regularidad, simplicidad, equilibrio, proporción, y emoción controlada. Así que no es contradictorio decir que un bonsái verdaderamente de vanguardia, puede ser un ejemplo clásico del estilo contemporáneo.
Contemporáneo: El término "bonsái contemporáneo" se utilizó por primera vez por Yuji Yoshimura. Llamó a todo lo que no se incluyó en el estilo clásico y neoclásico desde la segunda mitad del siglo 19 como contemporáneo. No hay sólo un estilo contemporáneo, sino que hay varios, aún no definidos realmente, pero definitivamente existentes y diferentes. Es importante señalar aquí que los estilos clásico, neoclásico y contemporáneo conviven desde hace bastante tiempo. No se puede decir que un período termina, como el clásico, y los siguientes, como el neo-clásico o contemporáneo, le siguen.
El estilo que es utilizado por los artistas más progresistas en este momento también se podría llamar el estilo moderno. Un artista típico es Kimura. Ernie Kuo insiste en que Kimura trabaja de una manera clásica, pero sólo con las técnicas modernas. Luis Fontanills deja claro que Kimura se ha anunciado como un artista contemporáneo con una situación de vanguardia: "Pero en el futuro, el arte del bonsái debe ser expresado de una manera nueva, con un concepto más amplio. Nosotros, los artistas jóvenes de bonsái no debemos tener miedo de romper con la tradición, para que los objetivos sean los mismos. Si no, el bonsái se desarrollará como una mera curiosidad, pero no un arte. .... Puesto que estamos rompiendo con la tradición de muchos siglos, nuestros bonsáis pueden no parecer muy atractivos. Tal vez los críticos no se dan cuenta de que la ruptura va sólo a la forma, pero no la sustancia, ya que nuestro espíritu en el cultivo de bonsái sigue siendo el mismo:.. la bondad, la belleza y la paz ". Algunos llaman a Kimura el culmen del bonsái clásico, dicen que él ha creado árboles clásicos. Kimura ha diseñado muchos bonsáis clásicos en los años setenta y ochenta, pero difícilmente puede ser llamado un artista clásico, sin más. Muchas de sus piezas contemporáneas son puntos de referencia para la mayor parte de los bonsáis contemporáneos que ha diseñado. Estos árboles pueden ser llamados clásicos (nota: no clasicistas), ya que serán las piezas principales de este período actual.
Luis Fontanills dice : "Lo que me atrajo más del trabajo de Kimura ... fue su obra escultórica más exploratoria (también trabaja en el género clásico). Sentí una conexión con su escultura viva, y no lo vemos como extraño; después, de nuevo, he crecido con el arte moderno como si fuera un niño. Él ha ampliado los límites del bonsái y ha creado un estilo expresionista/abstracto que se ha popularizado (madera muerta y mucho movimiento), ya que es dinámico y poderoso. Él es parte del movimiento de vanguardia en el bonsái. Este tipo de expresión /estilo ha llegado para quedarse. Esto no quiere decir que el estilo tradicional /clásico vaya a desaparecer, pero se verá enriquecido por ello, como la vanguardia se enriquece con el pasado."
Un buen artista contemporáneo es visto como alguien que es creativo y se atreve a romper nuevos motivos, que utiliza las viejas reglas sólo si lo estima conveniente. La ruptura deliberada de las normas clásicas se está extendiendo entre muchos artistas en Europa y también algunos en los Estados Unidos; es considerado como un tema, por supuesto. Los árboles son mucho más expresionistas o impresionistas de lo que solían ser, tienen tendencia a convertirse en extremos de acuerdo a las viejas normas.
Contemporáneo no significa un estilo uniforme. La historia dirá que una de las muchas tendencias actuales se convertirá en un estilo en sí mismo. El estilo "Kimura" es el más conocido: coníferas muy poderosas, con enormes troncos gruesos en comparación con la altura del árbol. Una proporción de 1:3 (anchura del tronco frente a altura del árbol) se ha convertido en normal, lo que se consideraba grotesco. Estos árboles pueden ser llamados "bonsái sumo" por su aspecto fuerte y en cierta manera exagerado. El uso de la madera muerta es dominante. Muchos árboles parecen vivir con un 90% de madera muerta. Las formas son fantásticas, irreales, aunque a menudo se utiliza la madera muerta de crecimiento natural. Las copas son muy pequeñas, haciendo hincapié en la potencia del tronco y la madera muerta. Toda la copa retrocede en importancia. A menudo parece estar ahí sólo para mostrar que el árbol está vivo. La copa decora el tronco poderoso y la abrumadora madera muerta, y no de otra manera. En el estilo clásico la copa era la parte más importante, sustentada por un tronco impresionante y, a menudo decorado con madera muerta. La copa suele ser diseñada de acuerdo a la silueta. No es tan importante dónde se coloquen las ramas exactamente. Si no hay una rama donde debe estar, una rama se dobla hacia abajo, a veces en contorsiones incómodas que están cubiertas por el follaje. La primera rama se vuelve menos importante. Es más importante que el follaje se encuentre en la posición correcta. La copa a menudo tiene la forma de seta con capas insinuadas. Cuando se utilizan troncos delgados tienen una fuerte tendencia hacia la forma en balsa. Las formas del tronco llegan a formas extremadamente contorneadas y muy retorcidas que antes se consideraban grotescas.
El uso de macetas va en nuevas direcciones. Se prueban toda clase de macetas "raras" y formas de plantación. Tradicionalmente, los árboles plantados en las rocas ni siquiera estaban clasificados como bonsái. Ahora los árboles plantados en rocas, en construcciones de hierro oxidado (Farrand Bloch) e incluso en las estatuas y los cráneos (Nick Lenz), se consideran bonsáis. La tendencia es hacer desaparecer del escenario el tokonoma, y se encuentran nuevas formas. Salvatore Liporace presenta un alerce enorme situado en un tambor de aceite oxidado. Los objetos de acento clásicos son cada vez más a menudo sustituidos por otras cosas.
Las coníferas son generalmente diseñadas en estilo contemporáneo, abstracto y expresionista. Los árboles de hoja caduca son a menudo de cierto estilo naturalista e impresionista similar al estilo japonés clásico o también en un estilo que se parece mucho al penjing. Ahora está llegando a Occidente una tendencia también con nuevas especies y formas nunca vistas. Se podría llamar bien sea contemporáneo o neoclásico.
Es evidente que el nuevo espíritu liberal abre las puertas a todo tipo de extravagancias. Esta nueva libertad puede ser utilizada por un genio o por un idiota para declarar cualquier cosa como arte del bonsái actualmente. Pero abre las puertas, y las nuevas creaciones que se desarrollen tendrán que pasar la prueba de la historia del arte. Se dirá finalmente si algo que no ha gustado a todos a primera vista era un error o un gran avance hacia una nueva era. Este avance puede ser claramente visible para todos o sólo un detalle sutil. Ayuda mucho no tener que preocuparse por un sensei tradicionalista haciendo después su crítica de una manera tradicionalista. Por lo tanto, no es por casualidad que las nuevas creaciones en su mayoría proceden de zonas donde la influencia japonesa es mínima. Algunos incluso se sienten orgullosos de no haber tenido maestros japoneses y sienten que no están "corrompidos" por los patrones de diseño pasados de moda. Al mismo tiempo, el resultado puede ser una gran cantidad de "buenos intentos" o simplemente basura.
Si se habla de arte del bonsái contemporáneo, a menudo se presentan ejemplos de los árboles, macetas o exposiciones que parecen ser contemporáneos, pero son bastante antiguos. Se supone que esto demuestra que no hay ese tal bonsái contemporáneo. Sí, siempre es posible encontrar un árbol que se hizo en el estilo contemporáneo, únicamente que fue mucho antes. Hay muchos ejemplos de árboles que pudieran pasar como bonsái moderno de vanguardia. Por lo general, se acepta que los bonsáis contemporáneos comenzaron ya a finales del siglo 19 en Japón y continuaron conviviendo con el estilo clásico hasta la actualidad. También se pueden encontrar macetas que son bastante antiguas y aún así tan extremas como algunas de hoy en día. Esto es muy interesante, pero no cambia el concepto.
En el arte siempre hay gente creativa que intenta algo. En países con tantos profesionales del bonsái como Japón o China prácticamente todo se debe haber intentado antes. Pero la prueba es si a partir de entonces se convirtió en una tendencia o un movimiento. Por lo general, este no fue el caso. Tal vez el artista no fue conocido suficientemente bien, tal vez la pieza no era lo suficientemente buena de todos modos, a menudo, o que simplemente no era aún el momento. Si un nuevo estilo se convierte en una tendencia, entonces se deben considerar los ejemplos más recientes como puntos de referencia importantes. Si una tendencia no evolucionó a partir de esto, se archiva. La historia del arte está llena de ejemplos de este tipo que no prueban en absoluto que un nuevo estilo no sea nuevo. A veces puede ocurrir que un estilo que se inició y terminó en un callejón sin salida hace algún tiempo, es redescubierto y realmente despega.
Tomemos el impresionismo como ejemplo. El término impresionismo, o la pintura impresionista, describe un tipo de pintura que es difuminada y algo amorfa, a diferencia de lo que es lineal y siluetas claras. Se aplica a muchas épocas. El término impresionismo, sin embargo se aplica a un determinado estilo de finales del siglo 19 ... Ya había pinturas murales romanas que son claramente impresionistas. Esto demuestra que los estilos de alguna manera siempre están presentes, pero a veces se hacen dominantes en un momento determinado. ¿Por qué esto no es verdad para el arte del bonsái?
Para un artista trabajar en un estilo específico significa más que una simple decisión de hacerlo. Esto significa un cambio total de la mente, de una manera de pensar sobre los bonsáis y de hacer bonsái, alejándose de las tradiciones radicalmente. Es comprensible que los que (¿aún?) sostienen las tradiciones tengan grandes problemas en aceptar esto y por lo general son feroces enemigos del cambio. La historia ha demostrado que los jóvenes revolucionarios envejecen y luego defienden ferozmente su revolución contra los nuevos.
Si bien todos sabemos cómo juzgar bonsáis clásicos, la mayoría de los aficionados tienen problemas con la evaluación de las creaciones más contemporáneas. Sólo parece que éstos se encuentran fuera de los límites de las normas establecidas; sólo están fuera de los límites de las reglas establecidas para el diseño clásico. Como señala Lynn Boyd, siempre hay normas, de larga duración y las normas universales para juzgar, incluso la vanguardia. Un juicio puede pasar de la lista de las convenciones (normas) en el área largo tiempo establecida de las proporciones, el equilibrio, la textura, la relación de objetos, organización conceptual, como lo que podría denominarse elementos compositivos. Y Brett Johnson añade que no están bien definidas las reglas para juzgar la escultura abstracta que trata de formas geométricas, según las cuales puedan ser juzgados los bonsáis como forma de escultura. Incluso si no hay reglas, siempre es el artista el que debe tener alguna norma con la que crear. Puede que no sea capaz de verbalizar esa norma, pero incluso así, allí está.
Esto requiere mucho de los jueces, ya que deben ser flexibles y tener una base de conocimientos más amplia a la que recurrir. Debido a esto, los bonsái en la categoría de vanguardia/contemporáneos deben clasificarse en una exposición como tales y juzgados como tales. Esta es otra razón por la que la clasificación de vanguardia y tradicional debe seguir proponiéndose y difundiéndose; permite la existencia y la validación de estos bonsáis más radicales dentro de las exposiciones públicas formales.
¿A dónde llevará todo esto?. Se habla mucho sobre estilos de bonsái nacionales (occidentales) que se están desarrollando o que incluso ya existe. El nuevo espíritu liberal lleva a algunos a creer que uno debe esforzarse para crear un estilo nacional. Pero, ¿quién necesita eso y por qué?. Hay casos en que algunas especies de árboles crecen de una manera particular en un país. Se trata sólo de la necesidad de un estilo nacional o más bien la forma. ¿Qué tal un estilo "Liechtenstein"?.
La verdad es que mientras algunos países están progresando a mayor velocidad que otros, es muy poco probable que el resultado sean claramente estilos nacionales. Este fue el caso de las artes en momentos en que casi no había comunicación entre las naciones. Hoy en día con la facilidad de viajar y la comunicación diaria, ya sea en persona o a través de imágenes, a través de las fronteras nacionales es normal que cada uno aprenda de todos a través de todo el mundo. El resultado será más libertad y más estilos distintivos personales, sobre todo en Occidente. Colin Lewis no ve una homogeneización de los estilos de bonsái, sino una diversificación, tanto como los espíritus creativos eleven el arte.
Habrá más artistas que se sientan libres de hacer lo que ellos piensan que está bien y van a tener seguidores, creando así nuevos grupos que diseñen de una cierta manera a lo largo de todo el mundo. Ellos pueden tener más seguidores en algunos países durante un tiempo, pero esto, entonces no debería ser llamado estilo "nacional".
Naturalista y abstracto
Naturalista: Este es el estilo donde los árboles se diseñan de manera que se parezcan tanto como sea posible, a los árboles reales. Esto significa que se tienen que romper muchas reglas clásicas. A menudo, estos árboles son vistos como "matas" o materia prima por parte del público que aún no se acostumbra a ellas. Parece que es fácil diseñar un árbol naturalista, sólo dejarlo crecer. Esto no es cierto en absoluto. Un buen bonsái en estilo naturalista necesita mucha más consideración que uno abstracto. De lo contrario, realmente es sólo una mata.
En muchas discusiones en Internet se hizo evidente que a la mayoría de las personas les resulta difícil aceptar el término "naturalista". El sentimiento general es que es superfluo, porque todos los aficionados serios de bonsái intentan crear bonsáis de apariencia natural, al fin y al cabo. Nada podría estar más lejos de la verdad. La mayoría de aficionados del bonsái intenta crear bonsáis, que son tan ideales como sea posible, haciendo todo lo contrario de los naturalistas; son más bien árboles abstractos, idealizados. Otro malentendido es que la gente piensa que un bonsái naturalista es el que se deja como está, sin ningún tipo de diseño posterior. Este, por supuesto, no es el caso. Lynn Boyd propuso llamarlo estilo "romántico". Este sería un término que se entendería mejor por la mayoría de la gente.
Naturalista y abstracto
Naturalista: Este es el estilo donde los árboles se diseñan de manera que se parezcan tanto como sea posible, a los árboles reales. Esto significa que se tienen que romper muchas reglas clásicas. A menudo, estos árboles son vistos como "matas" o materia prima por parte del público que aún no se acostumbra a ellas. Parece que es fácil diseñar un árbol naturalista, sólo dejarlo crecer. Esto no es cierto en absoluto. Un buen bonsái en estilo naturalista necesita mucha más consideración que uno abstracto. De lo contrario, realmente es sólo una mata.
En muchas discusiones en Internet se hizo evidente que a la mayoría de las personas les resulta difícil aceptar el término "naturalista". El sentimiento general es que es superfluo, porque todos los aficionados serios de bonsái intentan crear bonsáis de apariencia natural, al fin y al cabo. Nada podría estar más lejos de la verdad. La mayoría de aficionados del bonsái intenta crear bonsáis, que son tan ideales como sea posible, haciendo todo lo contrario de los naturalistas; son más bien árboles abstractos, idealizados. Otro malentendido es que la gente piensa que un bonsái naturalista es el que se deja como está, sin ningún tipo de diseño posterior. Este, por supuesto, no es el caso. Lynn Boyd propuso llamarlo estilo "romántico". Este sería un término que se entendería mejor por la mayoría de la gente.
Cualquier bonsái u obra de arte necesita un cierto grado de abstracción. El bonsái naturalista tiene un grado menor que el abstracto, pero aún lleva la mano del artista. Unicamente que el artista quiere que parezca que nunca fue tocado por mano humana. Si está bien hecho, puede parecer a la audiencia que no debería ser tan difícil, que podrían hacer lo mismo. Esto es similar a las personas que frente a una pintura abstracta moderna y dicen que esto lo podría hacer su niño. Bueno, si este es el caso, ¿por qué el niño no es famoso?.
Es interesante notar aquí que muchos artistas contemporáneos están o van hacia los árboles muy abstractos o muy naturales, hasta el extremo, en cualquier caso. A menudo se ha observado que muchos árboles clásicos de Japón son naturalistas y también la mayoría de penjings. En Occidente, esto parece ser revolucionario. Es sólo una reacción al diseño neo-clásico con adhesión servil a las normas que no fueron pensadas para ser utilizadas como una ley.
Tenemos que recordar que estilo en el contexto de esta clasificación significa: espíritu general de un bonsái, contrario a la forma, el aspecto de un árbol específico. Se puede adoptar bien una forma clásica y diseñarlo con los detalles naturalistas, creando así un bonsái naturalista, debido a la sensación general. Para muchas especies de árboles y sin duda para muchos árboles individuales las formas clásicas simplemente no encajan; por lo menos este es el sentimiento de algunos artistas. Así que han empezado a crear nuevas formas de árboles que antes no eran de uso general como bonsái. Vaughn Banting se ha atrevido a reproducir el aspecto natural del ciprés de los pantanos, que tienen una parte superior plana con varias copas en la naturaleza. El autor ha sido pionero en la forma de candelabro en coníferas. Muy a menudo árboles del estrato arbóreo son alcanzados por rayos y muere el tronco principal. Las ramas inferiores se convierten en uno o varios nuevos troncos que entonces parecen un candelabro. Otra forma que ha surgido para describir con precisión y representar los árboles que crecen en la naturaleza es el "estilo" Banyan para el Ficus. Los árboles Banyan crecen en climas tropicales y por lo general incluyen raíces aéreas que emergen desde el tronco y descienden de las ramas al suelo. En la naturaleza estas raíces funcionan para estabilizar al árbol y ayudarle a establecer su "territorio". Otro ejemplo es el "estilo" Baobab que se asemeja al crecimiento natural relativamente extraño de los árboles Baobab en África. En Sudáfrica los árboles baobab se diseñan como aparecen en la naturaleza, con sus enormes ramas que parecen gruesas raíces que se clavan en el aire.
Charles Ceronio menciona algunas formas más africanas, además de la forma Baobab, que él llama "estilo": La forma Pierneef: La acacia es un árbol que todos conocen en África. Crece con una típica, casi geométrica, copa semicircular, como un paraguas abierto. Otra forma es la Forma de Apice Plano, que a su vez es la forma típica de una especie de acacia que es común en las partes más cálidas de África y que actualmente se llama "acacia de ápice plano". La parte superior es muy plana y de hecho alguien de fuera de África podría considerarla grotesca. Pero todo esto es sólo una cuestión de lo que uno está acostumbrado a ver. Ceronio también define la Forma Bushveld o Natural, que es básicamente la misma que la escoba informal, o la Forma de Roble, que es la forma más común de árboles de hoja caduca . La Forma Ficus Salvaje es principalmente idéntica al "estilo" Banyan Americano.
La inmensa mayoría de los árboles de hoja caduca y muchas coníferas crecen en forma de escoba informal en la naturaleza, que por lo general tiene un solo tronco con alguna conicidad que muy pronto se extiende por varios troncos que crecen hacia arriba y otra difusión de las ramas hacia arriba cada vez mayor. El tronco y las ramas de esta forma se doblan. Cuando son rectos, se habla de la forma de escoba formal bien documentada. Es muy interesante notar que las reglas tradicionales de bonsái simplemente no tienen término para esta forma que es con mucho la más frecuente en la naturaleza. Cada aficionado al bonsái debe haberse preguntado alguna vez por qué se supone que no se diseñan los árboles como los que él ve enfrente de su patio. Los artistas contemporáneos de bonsái diseñan ahora exactamente de esa manera. Paul A. Ringo ha descrito esta forma que él llama "estilo de roble vivo" y se pregunta por qué no se utiliza con más frecuencia para las especies occidentales. Se puede ir más allá y también preguntarse por qué no se utiliza con más frecuencia para las especies asiáticas.
La forma de escoba informal podría tener una posición similar a la posición vertical informal o forma moyogi. Es muy difícil de creer que aún en 1955 en Japón parecía ser necesario alentar al público a usar esta "nueva" forma. Cuando los recursos naturales de materiales recolectados se habían reducido considerablemente llegó a ser normal crear bonsái de árboles de vivero. Estos fueron invariablemente de formas "ideales"; en su tiempo, la forma vertical formal demasiado a menudo fue el único ideal. Así que el consejo en "Una guía fácil para Bonsái" era: ".. la formación de los árboles individuales libremente de acuerdo con sus propias características, con el fin de plasmar al completo su aspecto especial". Esto condujo a la moda de tratar de diseñar cada árbol en forma vertical formal y por lo tanto la creación de clichés y repeticiones con lo cual todos parecían iguales y muchas veces no apta para las especies utilizadas. Parecía ser necesario dejar claro a la gente que los troncos no fueran rectos, tendrían que doblarse; las ramas no tenían que ser rectas, y siempre en la posición ideal, que tendrían que tener curvas y pliegues.
Es difícil de creer hoy que la forma vertical informal necesitó estímulo especial no hace mucho tiempo. Actualmente es la forma más común y popular. La forma de escoba informal podría seguir el mismo camino. No es nada más que una variación de la forma vertical informal, en la que la mayoría de las ramas aparecen a un nivel y las ramas, en general, tienen una fuerte tendencia a crecer hacia arriba, una forma que se encuentra en la mayoría de los árboles de hoja caduca en la naturaleza.
Naturalista y natural no son lo mismo. Un árbol naturalista, se puede crear con métodos de diseño muy artificiales. Es bastante posible tener un árbol con madera muerta totalmente artificial que fue creado tan bien que se ve absolutamente natural. También es común alambrar un árbol al 100% y con cuidado poner cada rama en su sitio de forma que el árbol se vea muy natural. Esta es una de las paradojas del bonsái.
Naturalista y natural no son lo mismo. Un árbol naturalista, se puede crear con métodos de diseño muy artificiales. Es bastante posible tener un árbol con madera muerta totalmente artificial que fue creado tan bien que se ve absolutamente natural. También es común alambrar un árbol al 100% y con cuidado poner cada rama en su sitio de forma que el árbol se vea muy natural. Esta es una de las paradojas del bonsái.
Como ha señalado Colin Lewis no debemos olvidar que los bonsái son una pequeña fracción del tamaño de sus semejantes naturales, por lo tanto, deben ser más simples en estructura y forma. Las características sobresalientes se deben mejorar y eliminar irrelevancias. Por lo tanto, simplemente no es posible copiar un gran árbol. Un bonsái no transmite necesariamente la apariencia exacta de un árbol natural, sino la sensación que uno siente cuando lo ve. Los artistas más hábiles magnifican la sensación presentándonos sólo aquellos elementos que la crean. Uno puede crear esta sensación por la simplificación y la idealización del árbol, por lo que lo convierte cada vez más abstracto. Entonces es un bonsái más bien abstracto. También se puede crear esta sensación utilizando las formas naturales y los detalles, entonces se convierte en un bonsái más naturalista. Pero aún está muy lejos de una copia directa de un árbol natural, sigue siendo un tanto idealizada y, por tanto abstracto, pero menos que la primera.
Sería un error pensar que es más fácil crear un buen bonsái naturalista que uno abstrato. Exactamente es cierto lo contrario. Un bonsái naturalista representa un ideal, un árbol natural típico. Lo que es normal, obviamente debe ser fácil de crear. Pero al igual que un movimiento elegante, en la danza o en atletismo, es engañoso en su simplicidad. Parece tan fácil ... hasta que tratas de copiarlo. Entonces la aparente sencillez se desenmascara para revelar bastante complejidad. Hay que tener en cuenta que un bonsái siempre es abstracto en cierta medida. Los bonsáis clásicos son bastante abstractos. Hay también reglas conocidas o directrices que nos dicen cómo crear un árbol clásico, abstracto. Pero hay muy pocas reglas escritas que nos digan cómo crear un árbol naturalista. La solución no es dejar que crezca el árbol, cortarlo y dejar que crezca de nuevo. Así, con el seto estándar y el método de dejar crecer se obtiene un árbol podado. Pero depende en gran medida de cómo fue podado el árbol . Bien puede convertirse de esa manera en un árbol abstracto. Reiner Goebel pregunta: "el bonsái surgió de plantas "naturales" o "naturalistas", hace algunos miles de años. Se tomó todo este tiempo para llegar a su actual estado de refinamiento. ¿Y ahora usted desea retroceder en el tiempo?" No, en absoluto. Esto es lo que significa: "Deténgase un momento y piense lo que está haciendo. El Bonsái es el arte de dar a un pequeño árbol en una maceta la apariencia de un gran árbol, o use cualquier definición similar. Actualmente, ¿qué hace la mayoría?. ¿Están buscando a los árboles grandes, naturales y tratando de llevar ese sentimiento a su bonsái'?. ¿O están buscando en los libros de bonsái las reglas y tratando de copiar las obras maestras de bonsái y aplicando las normas?. Esto último es el caso. ¿Qué tal un pintor que pinta personas, que va a museos, estudia libros, se esconde y pinta lo que SABE que debe ser pintado. Cuando camina por la calle él ve gente real, pero ni durante un segundo pasa por su mente que podrían ser utilizados como modelos. La gente real no se ajusta a las normas que esta persona ha aprendido sobre la gente "ideal". ¿Cambiar a la gente real o cambiar las reglas? "
Como John Naka ha señalado en repetidas ocasiones y muestra en sus famosos libros, los aficionados al bonsái no pueden mirar lo suficiente a los grandes árboles naturales para obtener inspiración para su arte. Lisa Kanis se ha dado cuenta de que los bonsáis influyen en la manera como se considera a los árboles en la naturaleza y no al revés. Esta es una observación interesante y explica por qué a tantos aficionados del bonsái les gusta mirar a los árboles y sus fotos, sólo para regresar y diseñar su bonsái para que se parezca a los bonsáis en vez de a los árboles naturales. En las discusiones en Internet es señalado reiteradamente que, si bien una imagen de un árbol en la naturaleza puede parecer hermoso a la mayoría de las personas, esto no significa que se viera bonito como bonsái. Lo que significa de verdad es: !si se rompen algunas reglas clásicas de bonsái!. ¿Qué te parece: una persona que parece hermosa a la mayoría de la gente no se ve hermosa en una pintura. Lo que significa de verdad es: si no se ve como el ser humano "ideal". ¿Cómo se puede conseguir tal lavado de cerebro?. Esto va tan lejos, que el bonsái que la gente ve como la imagen de un árbol natural que rompe con algunas reglas de bonsái, pero que se considera más bello por la abrumadora mayoría de la gente común, se llega a decir que no es un árbol bonito. No se dan cuenta que están aplicando las normas de bonsái neo-clásicas a un árbol natural y juzgándolo según éstas, en lugar de utilizar su sentido común y cambiar sus reglas de acuerdo a la realidad.
Una subcategoría del estilo naturalista es el estilo romántico. Los diseños en este estilo conducen el lado naturalista al extremo; trata de captar un árbol hermoso o paisaje también con la inclusión de accesorios como piedras y figurillas. Ejemplos son los penjings "agua y tierra" de Qingquan Zhao y algunas creaciones de Nick Lenz.
Una subcategoría del estilo naturalista es el estilo romántico. Los diseños en este estilo conducen el lado naturalista al extremo; trata de captar un árbol hermoso o paisaje también con la inclusión de accesorios como piedras y figurillas. Ejemplos son los penjings "agua y tierra" de Qingquan Zhao y algunas creaciones de Nick Lenz.
Abstracto o idealista: Crear cualquier bonsái u obra de arte significa un cierto grado de abstracción. Esto simplemente significa ir más allá de la apariencia naturalista. Mucha gente piensa que abstracto significa algo que no se reconoce. Esto no es cierto, es sólo una cuestión de grado. En lugar de la abstracción también se podría decir idealización. Se toma un árbol y se hace más ideal, por lo que es más hermoso. La pregunta es sólo hasta dónde llegar. La cuestión es también si se hace más hermoso y según qué gusto.
En el estilo clásico las coníferas están por lo general en un estilo abstracto, parecen un árbol natural, sólo que más ideal. La forma de la copa está idealizada, el tronco y el nebari son perfectos y las capas de ramas están bien definidas, con bordes limpios.
La abstracción puede llegar mucho más lejos en el estilo contemporáneo. Esto es cuando el diseño ha renunciado a tratar de seguir las formas naturales. Aunque siempre es un árbol vivo parece un árbol de otro planeta. La madera muerta se parece más a una escultura que madera muerta natural. Las copas se diseñan sólo para mostrar que el árbol está vivo. Las copas uniformes, pequeñas, que a menudo utiliza Kimura, van en esta dirección.
El árbol ideal es el arquetipo de un árbol, o un icono que el espectador reconoce como tal. Esto significa que el espectador debe tener la misma o similar idea de lo que es ideal para apreciar inmediatamente el bonsái. Con el bonsái clásico el espectador o bien siempre ha tenido un icono similar en su mente o bien ha aprendido a ver el arquetipo clásico como ideal.
Los artistas contemporáneos están utilizando materiales cada vez más extremos para formar bonsáis extremos. Hoy en día el aspecto más retorcido y fantástico, es el mejor. Esto significa que los artistas han cambiado la idea de un árbol ideal por un árbol extremo. Están buscando el material formado extremadamente que les permita hacer su diseño abstracto.
Esto no es un desarrollo totalmente nuevo en la historia del bonsái, es solo una novedad en las últimas décadas. Durante el período Edo (1603 - 1868) hubo un número considerable de modas de bonsáis retorcidos de formas fantásticas. Estos fueron mal vistos más tarde y hoy se están volviendo a poner de moda.
Abstracto y artificial no es lo mismo. No es necesario crear artificialmente un bonsái abstracto. En cuanto el árbol parezca algo estilizado, es abstracto. Si parece irreal, no de este mundo, como una escultura, es que es muy abstracto. Partes del árbol, o su totalidad, pueden ser naturales.
La madera muerta creada de forma natural, que no ha sido tocada por ninguna herramienta puede hacer que un sea bonsái abstracto si la apariencia es extrema. Un tronco que se formó por la naturaleza y se contorsiona y retuerce puede ser material para que un destacado bonsái sea abstracto. Esto es difícil de entender, pero hay que recordar que un bonsái no es una réplica de un árbol, sino una imagen, un icono de un árbol. Es clásicamente el icono de un árbol ideal, que es "normal", un árbol "natural". Esta imagen puede ser muy cercana a la realidad, entonces el bonsái es naturalista. La imagen puede estar más lejos de la realidad y, entonces el bonsái se vuelve más y más abstracto. En un punto la imagen no representa un árbol "natural, ideal", sino un árbol extremo, un árbol que es tan extremo, que no puede presentarse como típico.
Se puede imaginar una línea que se divide por la mitad. A la izquierda está lo naturalista, a la derecha lo abstracto. El que está en el punto extremo más alejado en la línea es absolutamente naturalista y en el otro extremo, un árbol absolutamente abstracto. Si alguien lleva el estilo naturalista al extremo, está haciendo matas y plantas en una maceta. En el otro extremo, si alguien lleva la abstracción hasta al límite, lleva un árbol a una maceta y lo poda en un triángulo escaleno perfecto, como se practica a veces. Ambos extremos probablemente no se consideran buenos bonsáis. La verdad está en algún lugar intermedio de esta línea, con naturalistas a la izquierda y abstractos a la derecha. Un bonsái específico nunca estará en el extremo de esta línea, sino en algún punto intermedio. El estilo que tenga depende de si se está más cerca del naturalista o del extremo abstracto. Todo lo que cuenta es la apariencia de los bonsáis. Un árbol muy naturalista a menudo se considera que no es un bonsái, sino un trozo de materia prima por parte del público. De la misma forma un árbol bastante abstracto a menudo no se considera tanto que sea un bonsái, sino más bien una escultura. Ambas creaciones se encuentran en dos extremos opuestos.
No hay ninguna diferencia en si la apariencia fue creada por el hombre o por la naturaleza. Por lo tanto, es perfectamente válido a veces llamar a un bonsái que se puso en una maceta más o menos inalterado, ya que se encontró en la naturaleza, un bonsái abstracto. Por otro lado, un árbol que estaba alambrado completamente y formado con una gran cantidad de madera muerta que se creó completamente artificial puede ser un bonsái naturalista.
Muchos aficionados al bonsái tienen problemas con lo que ellos llaman "excesivo" uso de la madera muerta y formas muy retorcidas. Ellos simplemente no quieren seguir al artista en su grado de abstracción. A menudo se dice que esto viene de la falta de exposición a los árboles silvestres muy viejos. Se pueden mostrar imágenes de árboles naturales que crecen en forma extrema e incluso probar que el bonsái en cuestión era más del 95% formado de la manera en que aparece en la naturaleza. Esto no ayuda, porque el bonsái es todavía abstracto en algunos extremos, porque no se parece a un árbol típico, sino un árbol extremo. El hecho de que se tenga que demostrar a la gente que estos árboles existen realmente en alguna parte, es prueba suficiente de la naturaleza abstracta de la creación. No hay necesidad de probar que un arce ideal, agradable y crecido naturalmente, un arce típico, existe.
Pius Notter ha sido pionero en el estilo abstracto en Europa. Ha utilizado el material natural que se puede encontrar en los Alpes en formas fantásticas para crear bonsáis expresionistas abstractos. En un principio se le acusó de no crear imágenes de los árboles, sino más bien esculturas. Esta es una reacción típica de un grado de abstracción que el público no siempre quiere seguir.
La naturaleza no tiene árboles abstractos. La naturaleza puede crear materiales extremadamente formados que se pueden llamar grotescos, enanos, retorcidos o lo que corresponda. El artista selecciona este material y lo utiliza para un árbol artístico. Sólo entonces se convierte en abstracto. Incluso si el artista decide no cambiar en absoluto lo que la naturaleza ha hecho se le puede llamar abstracto si forma parte del arte.
Es evidente que en el bonsái contemporáneo, los árboles extremos están cada vez más de moda. Mientras que un bonsái tiene que parecer un árbol "normal" de alguna manera en el estilo clásico, no parece que importe mucho más. Un árbol normal se considera un árbol aburrido. Algunos artistas buscan los materiales más extremos para formar los bonsáis excepcionales. A menudo se trata de material que hubiera sido considerado no apto para bonsái hace algunos años. Actualmente un tronco a menudo no puede producir suficientes giros y torceduras. Si la madera muerta hace una triple voltereta se considera excelente. Pero entonces, algunos artistas no pueden entender por qué el público no quiere que siga con su grado de abstracción en lo que consideran destacados bonsáis.
A los artistas contemporáneos les gustan las creaciones bastante abstractas. Es mucho más fácil parecer un gran artista cuando se diseña un bonsái extremo con atractivo "artístico", que es lo mismo realmente que un alto nivel de abstracción. El esfuerzo creativo de una obra más abstracta es generalmente mucho más evidente, aunque sólo sea de su desviación de la norma. Sin embargo, el truco para el éxito es ocultar estos esfuerzos creativos para que la figura del árbol sea el reclamo más que la estilización. Es en cierto modo una lástima que el bonsái naturalista no se vea tan artístico y por lo tanto no atraiga a muchos grandes artistas del bonsái.
A los artistas contemporáneos les gustan las creaciones bastante abstractas. Es mucho más fácil parecer un gran artista cuando se diseña un bonsái extremo con atractivo "artístico", que es lo mismo realmente que un alto nivel de abstracción. El esfuerzo creativo de una obra más abstracta es generalmente mucho más evidente, aunque sólo sea de su desviación de la norma. Sin embargo, el truco para el éxito es ocultar estos esfuerzos creativos para que la figura del árbol sea el reclamo más que la estilización. Es en cierto modo una lástima que el bonsái naturalista no se vea tan artístico y por lo tanto no atraiga a muchos grandes artistas del bonsái.
Impresionista y expresionista
Impresionista: En pintura, la mayoría de la gente cree que el impresionismo se relacionó con una nueva forma de tratar la luz y el color en las últimas décadas del siglo 19. Realmente era más que eso. Antes del impresionismo, los pintores pintaban lo que habían aprendido a pintar, lo que se les había enseñado a ver. En la tradición de la pintura académica iban a estudiar en edificios con luz parcialmente artificial y luego pintan paisajes y personas no como parecen en realidad, sino como el pintor había aprendido. Los impresionistas buscaron lo que realmente podían ver y pintaron exactamente eso y no lo que los académicos presionaban a pintar y cómo hacerlo. Ellos rompieron con la tradición y pintaron sus impresiones con los ojos y la mente abiertos para refrescar la realidad, y no lo que se esperaba; temática de objeto tradicional y el método de pintarlo. Esto significaba que habían surgido todo tipo de nuevas formas de ver y de expresión; aparecieron colores que de alguna manera se habían pasado por alto anteriormente. También pintaron las formas que vieron y no las que habían estudiado y aprendido a pintar.
Impresionista: En pintura, la mayoría de la gente cree que el impresionismo se relacionó con una nueva forma de tratar la luz y el color en las últimas décadas del siglo 19. Realmente era más que eso. Antes del impresionismo, los pintores pintaban lo que habían aprendido a pintar, lo que se les había enseñado a ver. En la tradición de la pintura académica iban a estudiar en edificios con luz parcialmente artificial y luego pintan paisajes y personas no como parecen en realidad, sino como el pintor había aprendido. Los impresionistas buscaron lo que realmente podían ver y pintaron exactamente eso y no lo que los académicos presionaban a pintar y cómo hacerlo. Ellos rompieron con la tradición y pintaron sus impresiones con los ojos y la mente abiertos para refrescar la realidad, y no lo que se esperaba; temática de objeto tradicional y el método de pintarlo. Esto significaba que habían surgido todo tipo de nuevas formas de ver y de expresión; aparecieron colores que de alguna manera se habían pasado por alto anteriormente. También pintaron las formas que vieron y no las que habían estudiado y aprendido a pintar.
Bastante parecido sucede en el arte del bonsái. En lugar de diseñar un bonsái de acuerdo con las directrices bien conocidas como uno sabe que "deben" parecer, se trata de captar el sentimiento de los árboles reales. Entonces la forma se convierte en menos importante que el aspecto general. Esto está en fuerte contraste con el estilo de bonsái clásico que se basa más o menos sólo en la forma "correcta" de los detalles para formar en definitiva el aspecto "correcto" de una forma específica. En el estilo de bonsái impresionista el artista trata de diseñar el árbol para que la impresión de lo que ve se refleje en los árboles naturales. Un bonsái impresionista quiere parecerse a un árbol en lugar de a un bonsái estereotipado. Son típicas las formas de las ramas que están próximo a lo natural frente al rígido y super cuidado aspecto de las ramas clásicas. También se encontrarían en este estilo las formas del tronco poco comunes, características como agujeros, grietas y ramas hacia arriba. Los árboles se forman de la manera en que crece la especie en la naturaleza. Un abeto parece un abeto.
El nuevo estilo es especialmente evidente en los árboles de hoja caduca. Nunca se forman para parecerse a una conífera. Los árboles impresionistas suelen ser también árboles naturalistas, pero no necesariamente. Un árbol con retraso en el crecimiento natural con giros extremos y madera muerta excepcional puede convertirse en un bonsái que es muy abstracto y al mismo tiempo muy impresionista. Es la parte natural del árbol lo que lo hace impresionista.
Dos formas tradicionales bien documentadas son impresionistas en la naturaleza. La forma de escoba formal es una réplica exacta de lo que parece un árbol de Zelkova si le dejamos que crezca como un árbol aislado en un parque. El uso de este estilo en la especie es impresionista y naturalista. Si se utiliza la forma escoba formal con tronco y ramas rectos para un arce, sería más abstracto, pero todavía naturalista. Ahora se ha convertido en un icono o estereotipo. Si se usa en una conífera, es abstracto y expresionista y en conjunto probablemente no es un bello bonsái en absoluto. La forma de escoba informal con el tronco y las ramas dobladas sería impresionista y naturalista para arces y gran número de otros árboles de hoja caduca.
La forma azotada por el viento también es muy impresionista en la naturaleza. Si se hace bien, da la sensación maravillosa de soplo del viento a través de cada hoja y rama. Generalmente se hace, sin embargo, demasiado abstracto, por lo que el movimiento parece estar congelado y no natural. La forma "creciendo hacia la luz" es similar, pero una versión contemporánea impresionista de la forma "a un lado". El árbol crece hacia fuera de un hueco oscuro o un acantilado directo hacia la luz y crece hacia un sólo lado. Esto es más activo y suele ser más convincente que la forma azotada por el viento.
Expresionista: El expresionismo se ve en fuerte contraste con el naturalismo e impresionismo. No quiere copiar la realidad, sino que quiere mostrar su reacción a la realidad. Este es el estilo donde el artista tiene una imagen interior de un árbol ideal en general (sobre todo, pinos) o un árbol ideal de una determinada especie. El diseño sigue este ideal en vez de lo que muchos árboles parecen realmente en la naturaleza. A veces, este ideal se impone sobre el material que simplemente no es adecuado para él. Un árbol expresionista por lo general se quiere parecer tanto como sea posible a un buen bonsái tradicional /clásico. Los árboles clásicos y neoclásicos, por lo general son expresionistas. Los árboles de hoja caduca que se parecen a una conífera son ejemplos típicos del estilo expresionista; tratan de retratar un "Concepto de Arbol Iconográfico" que se basa en la tradición del bonsái clásico.
Muchos artistas se aburren con la repetición de un mismo árbol ideal una y otra vez y buscan nuevos ideales. Tienen tendencia a crear formas más extremas y próximas a lo grotesco y vulgar. El expresionismo por lo general acompaña al estilo abstracto, pero no necesariamente. Se puede diseñar un bonsái que es bastante naturalista en el estilo expresionista. Nick Lenz ha realizado árboles muy naturalistas establecidos en estatuas de duendes o en cráneos reales, espinas o cerámica manufacturada. Esto es realismo fantástico, que es surrealismo. Esta yuxtaposición inesperada de un árbol naturalista/impresionista y un recipiente inusual, que se carga con un significado emocional fuerte, es surrealismo en bonsái.
El artista de bonsái impresionista quiere dar la sensación de un árbol de verdad, quiere "mostrar la verdad", mientras que el artista expresionista quiere "inventar la verdad". La verdad inventada es mejor que la verdad real, al menos es así para el expresionista.
Trascendental y Material
Trascendental o metafórico: Este es el estilo que ve más allá, en un árbol, que un simple árbol. Puede ser un ser humano, un animal. El árbol entero puede ser visto como un humano o animal, o sólo partes del árbol. A menudo los penjing fueron hechos para parecer un animal o un ser humano o para dar por lo menos esa impresión. Nick Lenz ha creado algunos bonsáis que él llama "antropomórficos".
Trascendental o metafórico: Este es el estilo que ve más allá, en un árbol, que un simple árbol. Puede ser un ser humano, un animal. El árbol entero puede ser visto como un humano o animal, o sólo partes del árbol. A menudo los penjing fueron hechos para parecer un animal o un ser humano o para dar por lo menos esa impresión. Nick Lenz ha creado algunos bonsáis que él llama "antropomórficos".
Material o realista: Esta es la forma común de diseñar un árbol para que parezca un árbol.
Resumen
¿Significa todo esto que nos vamos a deshacer de todos los nombres bien conocidos de "estilos" y reemplazarlas con "naturalista, abstracto, clásico, etc.?. No, esto sería un gran malentendido. Todas las formas que conocemos y todas los que se puedan imaginar son válidas. Unicamente se consigue una nueva dimensión. Hasta el momento la clasificación de los bonsáis es unidimensional. La comprensión inherente es que sólo hay un estilo posible, el clásico. Cuando se acepta que una forma determinada puede tener muy diferentes sentimientos o apariencias o un espíritu diferente y se está de acuerdo en que esto puede ser llamado estilo, entonces una forma de bonsái dado puede estar en muchos estilos diferentes. Con la definición de algunos de estos estilos se crea una segunda dimensión que haría la clasificación más precisa. Incluso es posible ir más allá y añadir una tercera dimensión o una cuarta. Esta podría ser: tamaños de bonsái, o especies principales de árboles, como las coníferas y caducifolias. Aunque todas las especies de árboles podrían constituir la tercera dimensión, o incluso otras dimensiones.
Clásico
Contemporáneo
Naturalista
Abstracto
Más estilos
Vertical formal
Vertical informal
Cascada
Semicascada
Forma Inclinada
Escoba formal
Escoba informal
Sobre roca
Literati
Muchas más formas
Tabla 1: Esta tabla muestra los estilos en el eje horizontal y las formas en la escala vertical. No aparecen todos los estilos y las formas. Su objetivo es clasificar a un bonsái específico situándolo en un gráfico. Un árbol está siempre al menos en una forma y un estilo. A menudo no es fácil decidir, porque no hay líneas definidas de establecer entre las categorías. Se tiene que ser consciente de que un solo árbol puede estar a veces en más de una forma y más de un estilo.
Resumen
¿Significa todo esto que nos vamos a deshacer de todos los nombres bien conocidos de "estilos" y reemplazarlas con "naturalista, abstracto, clásico, etc.?. No, esto sería un gran malentendido. Todas las formas que conocemos y todas los que se puedan imaginar son válidas. Unicamente se consigue una nueva dimensión. Hasta el momento la clasificación de los bonsáis es unidimensional. La comprensión inherente es que sólo hay un estilo posible, el clásico. Cuando se acepta que una forma determinada puede tener muy diferentes sentimientos o apariencias o un espíritu diferente y se está de acuerdo en que esto puede ser llamado estilo, entonces una forma de bonsái dado puede estar en muchos estilos diferentes. Con la definición de algunos de estos estilos se crea una segunda dimensión que haría la clasificación más precisa. Incluso es posible ir más allá y añadir una tercera dimensión o una cuarta. Esta podría ser: tamaños de bonsái, o especies principales de árboles, como las coníferas y caducifolias. Aunque todas las especies de árboles podrían constituir la tercera dimensión, o incluso otras dimensiones.
Clásico
Contemporáneo
Naturalista
Abstracto
Más estilos
Vertical formal
Vertical informal
Cascada
Semicascada
Forma Inclinada
Escoba formal
Escoba informal
Sobre roca
Literati
Muchas más formas
Tabla 1: Esta tabla muestra los estilos en el eje horizontal y las formas en la escala vertical. No aparecen todos los estilos y las formas. Su objetivo es clasificar a un bonsái específico situándolo en un gráfico. Un árbol está siempre al menos en una forma y un estilo. A menudo no es fácil decidir, porque no hay líneas definidas de establecer entre las categorías. Se tiene que ser consciente de que un solo árbol puede estar a veces en más de una forma y más de un estilo.
Así que los estilos se pueden mezclar con las categorías. Y la mayoría de las formas pueden aparecer en la mayoría de estilos. ¿Dónde está el estilo Literati?. Existe el estilo Literati medio-clásico, que es un tronco delgado en estilo naturalista e impresionista. En estilo contemporáneo a veces también puede ser abstracto si el tronco es muy retorcido, y/o si la copa es sólo un parche simbólico de verde.
Con esta clasificación es obvio que un árbol puede tener varios estilos diferentes y varias formas diferentes al mismo tiempo. Esto no es una contradicción, sino una aclaración; siempre fue así, sólo que no teníamos palabras para describirlo. Un árbol por lo general sólo tiene un estilo principal o la forma principal al margen de una categoría. Por ejemplo, un bonsái no suele ser radicalmente impresionista y expresionista, vertical formal e informal al mismo tiempo. Un árbol es o bien clásico o bien contemporáneo, pero por lo general no ambos. Pero a veces, elementos de ambas categorías de estilo extremo se pueden encontrar en un bonsái. No hay, de forma absoluta, bonsáis naturalistas o abstractos. Todos ellos se ubican en algún punto entre estos dos extremos.
La forma es menos ambigua: el bonsái es una cascada o vertical formal, es un árbol de tronco delgado o de tronco grueso; tiene poca o mucha madera muerta, etc. Pero pueden ser descritos como pertenecientes a diferentes estilos y también a más de una categoría de formas. Un bonsái puede estar en estilo contemporáneo, naturalista, impresionista con la forma vertical informal y mucha madera muerta. Además, podría incluso ser un árbol de flor como de fruto. En primer lugar se tendría que haber dicho que este árbol se encuentra en el "estilo vertical informal".
Un bonsái no tiene que permanecer en el estilo en que fue diseñado. Obviamente, siempre puede ser rediseñado. Es bastante posible tener un árbol en el estilo naturalista, impresionista y cambiarlo al estilo abstracto, expresionista. También la forma se puede modificar por rediseño. Una forma vertical informal puede ser modificado a una forma inclinada o una forma unilateral. Además de estos drásticos cambios en el estilo hay más cambios sutiles que ocurren más o menos sin la interferencia del artista. Por envejecimiento, un árbol puede cambiar de estilo. No es raro que un bonsái que solía ser bastante abstracto "superestilizado", aspecto bastante pulido, consiga un aspecto mucho más natural con sólo dejar que crezca de nuevo. Un árbol de hoja caduca que fue diseñado con alambrado completo a menudo se ve de alguna manera artificial/abstracto. Cuando el nuevo crecimiento en los años siguientes es reducido y no se alambra más, a menudo la copa desarrolla una sensación agradable naturalista/impresionista. Después de algunos años las contorsiones artificiales de las principales ramas que se formaron por el hombre, obviamente, adquieren una forma más natural y pátina que cambia el estilo. Los bonsáis de coníferas a veces deciden dejar morir sus ramas inferiores. Esto puede resultar en un cambio de estilo de abstracto a más natural.
Un artista puede, por supuesto, trabajar en varios estilos. Es perfectamente normal encontrar árboles en los estilos clásico y contemporáneo de una persona. Afirmar que Kimura ha hecho muchos bonsáis clásicos no es prueba de que no sea un artista contemporáneo. Al final lo que cuenta es el estilo que la mayoría de la gente adjudique a una persona. Picasso ha hecho excelentes pinturas más naturalistas en sus años más jóvenes, pero todo el mundo lo conoce por sus obras abstractas. Un desarrollo normal para un artista sería la de comenzar con la realización de los bonsái clásicos y luego empezar a experimentar con diseños más contemporáneos.
Se podría decir que las especies de árboles tienen su estilo. ¿No hay un estilo de haya o de un estilo de pino?. Lynn Boyd dice: "No, no lo hay, cada árbol tiene una forma particular y lo diseñamos de una manera coherente con esta forma. Incluso si en el diseño de la forma original del árbol se destruye la forma aún tendría forma de "árbol" claramente "individualista". O bien lo diseñamos en armonía con esa forma, imprimiéndole sólo lo suficiente para mejorarlo, o lo empujamos a un estilo "expresivo" completamente nuestro. En el impresionismo sólo tenemos que añadir toques que son nuestra respuesta personal a/con la naturaleza del árbol. En el expresionista vamos más lejos, hacemos de los árboles una expresión de nuestro arte con más fuerza y menos de la forma rústica, original del árbol. El estilo podría ser apasionadamente expresionista. La forma natural del árbol puede contribuir a la inspiración del artista. Imagínese lo que algunos yamadoris malformados podrían inspirar a hacer. Esto podría tentarnos a intentarlo y abrirse a amplias variaciones de la forma natural ideal. ¿Entonces no sería la inspiración de un arce bellamente formado ser posiblemente un suave toque artístico? ¿No podría ser tan poco, como sólo enmacetarlo y decorar el árbol para 'exhibirlo'?. Sería impresionista porque lo hemos "reclamado" y lo cambiamos precisamente así. O puede requerir la rectificación de una rama, el recorte aquí y allá para una mayor impresión de perfección de una forma ideal. Podemos tener en la materia prima que seleccionamos formas ideales (arquetipos), o formas un poco menos perfectas de ese árbol, o podemos hacer que lo malformado se exponga. Cada uno inspiraría como una forma de árbol individual. "
¿Por qué todas estas nimiedades?
¿Es sólo una discusión sobre vocabulario y significado?. Así que ¿por qué se tiene que aprender todo el vocabulario, cuando creemos tener ya suficiente vocabulario en el mundo del bonsái? El esquema de clasificación propuesta puede servir para varios propósitos.
¿Es sólo una discusión sobre vocabulario y significado?. Así que ¿por qué se tiene que aprender todo el vocabulario, cuando creemos tener ya suficiente vocabulario en el mundo del bonsái? El esquema de clasificación propuesta puede servir para varios propósitos.
El más importante es ser capaz de comunicarse sobre bonsáis generales y específicos de una manera más clara. El propósito aquí es dar a todos un lenguaje más significativo y familiar a medida que crecemos en una forma de arte de ámbito mundial. Esto es lo mismo que se ha hecho con otros objetos de arte. Hace la comunicación más clara, pero no necesariamente más fácil. Se vuelve más compleja porque ahora lo podemos describir. Era compleja antes, pero no siempre existen las palabras adecuadas que todo el mundo entienda para comunicarse. Con este esquema se puede, por ejemplo, explicar por qué un cierto esquema de juicio es unilateral ya que sólo los árboles de un estilo pueden puntuar alto en él. Se puede abrir los ojos a los jueces y también a grupos de personas, a los líderes de opinión, que pensaban que de alguna manera todos los bonsáis pertenecen o deberían pertenecer a un estilo general, que es el clásico. Se puede explicar por qué un bonsái puede puntuar muy bajo en los aspectos singulares en un esquema de juicio orientado clásicamente y al mismo tiempo muy alto en la apariencia general.
Las largas discusiones en Internet han demostrado que los artistas establecidos serán los últimos en aceptar esta clasificación. Pueden señalar con orgullo sus logros que se han hecho sin esta "innecesaria" clasificación. También pueden tener miedo de perder terreno si se están convirtiendo en nuevos estilos aceptables y sus propias creaciones pueden ser consideradas como pasadas de moda. Vendrán más aplausos de los artistas que ya rompen nuevos motivos, porque ven la oportunidad de llegar a ser más aceptados. Pero, como Alan Walker ha señalado, a menudo encuentran degradante una clasificación y la trivialización de sus creaciones, ya que resta valor a la frescura y la singularidad de los bonsáis y plantas en un laberinto de fórmulas estereotipadas.
La segunda razón es poder pensar en sus propios árboles bajo una nueva luz. Usted puede preguntarse, por ejemplo, por qué muchas personas tratan de convencerlo de que cambie el estilo de este árbol, mientras que realmente le gusta exactamente de la manera como está. Ah, es porque lo ven con ojo clásico, abstracto, expresionista, que es el ojo "clásico". Y usted lo ve con el ojo contemporáneo, naturalista, impresionista. Por lo tanto, son dos categorías diferentes que no son fácilmente comparables. Es también una cuestión de gusto adquirido. Ahora usted puede volver y escuchar las observaciones mucho más relajado, porque sabe que no hay nada "malo", es sólo el punto de vista, que se ha acostumbrado o no a un estilo.
La tercera razón es conocer mejor lo que estás haciendo cuando diseñas un árbol. Por ejemplo, usted puede pensar que rompe las reglas cuando se diseña una rama de cierta manera. Incluso puede sentirse reacio y culpable por ello. Ahora usted sabe que usted está tratando de crear de una manera impresionista, naturalista. Usted realmente no rompe reglas "eternas"; !el diseño contemporáneo trata de romper las reglas, en cierta manera!. Sólo lo haría si estuviera tratando de crear un árbol clásico. También puede tener en cuenta que salir del estilo clásico abre un completo nuevo mundo, pero no hace las cosas más fáciles. Usted no puede hacer cualquier cosa y le cuesta más que antes, porque no hay tantas reglas escritas, sino que hay algunas que usted tiene que descubrir. También es consciente de que la gente juzgará a su árbol con ojos clásicos y posiblemente no les guste. Usted puede ser más conscientes de que lo está haciendo para usted mismo y no para otros. También puede darse cuenta de que está diseñando un árbol en una forma que no sea apropiada para la especie. Por ejemplo, puede darse cuenta de que está haciendo bonsái neo-clásico (o clasicista) cuando diseña un arce tridente que parece un pino.
La cuarta razón es para poder hablar a la gente en un taller, en una crítica de árboles, en una galería interactiva. Además de hablar de la forma, de la que por lo general son muy conscientes, se puede hablar sobre el estilo del árbol del que a menudo no son conscientes. Cuando alguien le pregunta qué ramas cortar, y cómo formar la copa, se puede explicar que esto es ante todo una cuestión de estilo. El estilo es lo primero y decide las reglas de cómo diseñar el árbol. Puede decir que no es necesario diseñar siempre de la manera clásica. También puede decir que hay una gran diferencia entre un estilo naturalista que sigue un cierto diseño rígido con muchas reglas no escritas y algunas escritas y un bonsái amateur que no esté realmente bien diseñado. Esto puede ayudar a las personas más que decirles: "corta esta rama".
La quinta razón es ser capaz de explicar algunos fenómenos en el bonsái. Una de ellas es que muchos de los entusiastas de bonsái tienen un gran problema con los bonsáis contemporáneos. O bien son demasiado abstractos para ellos o simplemente demasiado naturalistas, sin parecer un bonsái (clásico o clasicista). Se puede explicar por qué no ayuda incluso probar con fotografías que existen árboles extremos. Otro fenómeno es el hecho de que bastantes de los artistas contemporáneos de bonsái no hacen mucho o nada con árboles de hoja caduca. Se puede explicar que esto es así porque no se prestan a la abstracción extrema como hacen las coníferas. La abstracción extrema se considera "artística", mientras que el naturalismo extremo parece ser sólo un resultado hortícola. La gran dificultad y largo tiempo en la creación de un destacado árbol naturalista no es inmediatamente visible, mientras que el arte en la creación de una pieza de arte abstracto es inmediatamente visto, sobre todo si esto se hace en un par de horas en el escenario.
La sexta razón es la esperanza de abrir el camino hacia una mayor tolerancia. Simplemente aceptando que hay diferentes estilos se debe ser capaz de aceptar que todos ellos son arte del bonsái, pero no necesariamente para el gusto de todos. Colin Lewis ve una similitud con la apreciación de la pintura: "Hay aquellos aficionados al arte que prefieren, por ejemplo, los paisajes clásicos de pintores como Gainsborough y Constable. Otros se deleitan en las obras impresionistas de Cézanne, quizás, o Monet. Todavía otros tienen una predilección por el abstracto, aparentemente sin sentido, Pollock. Pero ninguno de ellos acusan a las preferencias de los demás de no ser de arte, o no ser pintura. Estas acusaciones sólo provienen de personas que realmente no entienden el arte, ningún tipo de arte. "Es perfectamente aceptable que no gusten todos los estilos de bonsái, pero no quiere decir que los árboles de un cierto estilo "no son bonsáis" o "no son arte". La exclusión de las nuevas tendencias es un signo de inseguridad de los que proponen la exclusión.
Lo que esta propuesta no es:
Esta clasificación no es tan revolucionaria como pueda parecer a primera vista. A los "estilos" tradicionales y bien conocidos se le acaba de llamar ahora, formas. Todos ellos están allí y permanecen igual que los aficionados del bonsái los conocen (se han añadido algunos que entran en la lógica). Su descripción o normas, que serían las directrices, permanecen iguales en el estilo clásico/neo-clásico. Sin embargo, los mismos principios que lo forman también se puede utilizar en estilo contemporáneo, pero con otro aspecto general. La diferencia de aspecto proviene de la aplicación de diferentes normas (no escritas) para la misma forma.
Esta clasificación no es tan revolucionaria como pueda parecer a primera vista. A los "estilos" tradicionales y bien conocidos se le acaba de llamar ahora, formas. Todos ellos están allí y permanecen igual que los aficionados del bonsái los conocen (se han añadido algunos que entran en la lógica). Su descripción o normas, que serían las directrices, permanecen iguales en el estilo clásico/neo-clásico. Sin embargo, los mismos principios que lo forman también se puede utilizar en estilo contemporáneo, pero con otro aspecto general. La diferencia de aspecto proviene de la aplicación de diferentes normas (no escritas) para la misma forma.
La clasificación propuesta no está destinada a evaluar directamente los bonsái, pero puede ser utilizada para ello. Puede decir que el árbol tiene este o aquel estilo y esta o aquella forma. Pero esto no dice nada acerca de su juicio, y no debería. Por supuesto que puede añadir su juicio y decir lo que le gusta y lo que no le gusta. Se puede decir más claro con la nueva clasificación. Se puede criticar un árbol con referencia al sistema de clasificación de una manera más neutral.
El esquema no se debe utilizar para seguir rígidamente un cierto estilo y la forma de crear un "buen" bonsái. Nunca fue bueno seguir sólo reglas. Para el artista la clasificación puede ser una manera de empezar a entender todos los estilos y las normas y luego hacer lo que le gusta y olvidarse de ello de nuevo. Para el principiante y el inseguro puede ser un refugio. Un patrón al que aferrarse no hace ningún mal. Si bien esto puede ser muy útil al principio, no es la manera de hacer arte o incluso buen arte.
Esto no es un intento de cambiar la forma en que se practica o se ve el arte del bonsái. Sólo sirve para describir lo que ya está sucediendo y sucederá en el futuro. Nadie está obligado a que le guste un cierto estilo, sólo se sugiere que se acepte su existencia. Esta clasificación debería permitir una mejor manera de comunicar lo que está pasando. Como Andy Rutledge apunta, muchos aficionados ven el bonsái como un esfuerzo artístico y sobre todo quieren que sus árboles logren algún objetivo artístico y sean juzgados en consecuencia. Otros ven los bonsáis como una tradición que se lleva a cabo en la forma tradicional, mientras que otros ven los bonsái como un esfuerzo sobre todo hortícola con lealtad vaga o ninguna atención a lo que algunos consideran como las reglas "universalmente aceptadas" para el diseño de los árboles. Cada uno de estos enfoques son válidos para sus defensores y la mayor parte de esta discusión es irrelevante de todos modos. No es la intención decirles qué tienen que hacer. Es sólo la intención de ofrecer un mejor medio de comunicación para aquellos que lo deseen.
Este esquema de clasificación propuesto no es necesariamente para todos. Pero incluso para los principiantes y aficionados intermedios del bonsái puede ser útil saber algo acerca de los estilos distintos del clásico. Incluso si se ha decidido trabajar en un determinado estilo puede ser útil para ver los libros, revistas, exposiciones y galerías virtuales bajo una luz diferente. Para aprender a clasificar por uno mismo y en la educación.
Durante los intensos debates sobre este tema en el Club de Bonsái de Internet algunos dijeron "Realmente creo que el tiempo y el esfuerzo se emplea mejor en aprender el oficio y mejorar la técnica." O: ".. ¿Para qué gastar tiempo tratando de fijar un leguaje específico, nuevo o "mejor", o las normas terminológicas qué tienen que ver con trabajar los árboles? Nada ... "La mejor respuesta a esto la dio Rick Choate: "Ah, pero ¿qué pasa con aquellos que pueden hacer ambas cosas al mismo tiempo?"
Estas condiciones, tan nuevas como puedan parecer a muchos aficionados del bonsái no son una invención del autor. Son transferibles, en mayor o menor grado, entre diferentes artes. Cuanto mejor conocido o más universal mantengamos un concepto de estilo, forma, etc., más oportunidad tendremos de comunicarnos.
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